Se encargan de la administración, recursos humanos, atención al cliente, mantenimiento.
Este tipo de servicios ha sufrido fuertes cambios debido a dos procesos.
El primero es la externalización consistente en que un servicio se subcontrata a otra empresa. Por ejemplo, una empresa de coches necesita publicidad para su nuevo modelo, en vez de tener un departamento de publicidad se contrata a una empresa de marketing para que haga el trabajo.
El segundo proceso es la deslocalización, el traslado de oficinas o sedes de una empresa a otra parte del mundo con el fin de ahorrar costes.