Finalmente, en cuanto a la definición del término DC, la primera se recoge en Cambrigde (1948), y en el documento de las Naciones Unidas (1955) se re-define el DC como “un proceso destinado a crear condiciones de progreso económico y social para toda la comunidad con la participación activa de esta, y la mayor confianza posible en su iniciativa” (en Ander-Egg, 2005). Este mismo autor en 1982 ya había señalado que, en 1958, el DC era un proceso mediante el cual el propio pueblo participa en la planificación y en la realización de programas que se destinan a elevar su nivel de vida.