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Trastornos relacionados con traumas y factores de estrés - Coggle Diagram

- - - - La negligencia social grave es un requisito para el diagnóstico de trastorno de apego reactivo y también es el único factor de riesgo conocido para el trastorno. Sin embargo, la mayoría de los niños gravemente descuidados no desarrolla la enfermedad.
        
        El pronóstico parece depender de la calidad del ambiente de cuidado después de la negligencia grave.
  - - - Las características clínicas de la enfermedad se manifiestan de manera similar en edades comprendidas entre los 9 meses y los 5 años. Parece ser que sin tratamiento y sin una recuperación en entornos de cuidado normativos, los signos del trastorno podrían persistir, al menos, durante varios años.
        
        No está claro si el trastorno de apego reactivo se puede producir en los niños de mayor edad y, de ser así, tampoco se sabe cómo se podría diferenciar su presentación de la de los niños pequeños.
  - - - Los niños con discapacidad intelectual deben exhibir las habilidades sociales y emocionales comparables a sus habilidades cognitivas, y no muestran la profunda reducción del afecto positivo ni las dificultades de regulación emocional evidentes en los niños con trastorno de apego reactivo.
        
        Además, los niños con retrasos de desarrollo, que han alcanzado una edad cognitiva de 7-9 meses, deben demostrar apegos selectivos independientemente de su edad cronológica. Por el contrario, los niños con trastorno de apego reactivo muestran una falta de apegos preferentes a pesar de haber alcanzado una edad de desarrollo de por lo menos 9 meses.
    - - Son pocos los datos científicos que sugieren que los niños con trastornos de depresión tienen dificultades en el apego. Así pues, los niños que han sido diagnosticados de trastornos depresivos todavía deberían buscar y responder a los intentos de consuelo por parte de sus cuidadores.
    - - En concreto, los niños pequeños de ambas afecciones pueden manifestar una expresión inhibida de las emociones positivas, retrasos cognitivos y del lenguaje, y alteraciones en la reciprocidad social. Por ello, sería necesario diferenciar el trastorno de apego reactivo del trastorno del espectro autista.
        
        Estos dos trastornos se pueden distinguir basándose en las diferentes historias de abandono y por la presencia de intereses restringidos o comportamientos ritualizados, un déficit específico en la comunicación social y comportamientos de apego selectivos. Los niños con trastorno de apego reactivo han experimentado una historia de abandono social grave. No es común que los niños con trastorno del espectro autista tengan una historia de abandono social.
        
        Los intereses restringidos y los comportamientos repetitivos, característicos del trastorno del espectro autista, no son una particularidad del trastorno de apego reactivo. Estas características clínicas manifiestan una fijación excesiva a rituales y rutinas, con intereses restringidos, obsesivos y reacciones sensoriales inusuales.
        
        Los niños con cualquiera de ambos trastornos también pueden mostrar una variedad de funcionamiento intelectual, pero sólo los niños con trastorno del espectro autista muestran alteraciones selectivas en los comportamientos sociales de comunicación, tales como la comunicación intencional. Los niños con trastorno de apego reactivo muestran un funcionamiento de comunicación social comparable a su nivel general de funcionamiento intelectual.
        
        Por último, los niños con trastorno del espectro autista normalmente muestran una conducta de apego que es característica de su nivel de desarrollo. Por el contrario, los niños con trastorno de apego reactivo lo hacen de una manera rara o inconsecuente.
  - - - Los síntomas internalizantes también pueden coexistir con el trastorno de apego reactivo.
        
        Aunque no se ha establecido con claridad, sí se ha sugerido que existe relación entre el trastorno de apego reactivo y los problemas de conductas externalizantes o el trastorno de déficit de atención/hiperactividad.
  - - - Persistente: El trastorno ha estado presente durante más de 12 meses.
    - - El trastorno de apego reactivo se especifica como grave cuando un niño tiene todos los síntomas del trastorno y todos ellos se manifiestan en un grado relativamente elevado.
    - - 2. Cambios repetidos de los cuidadores primarios que reducen la oportunidad de elaborar un apego estable.
      - 3. Educación en contextos no habituales que reduce en gran manera la oportunidad de establecer un apego selectivo.
      - 1. Negligencia o carencia social que se manifiesta por la falta persistente de tener cubiertas las necesidades emocionales básicas para disponer de bienestar, estímulo y afecto por parte de los cuidadores adultos,
    - - 2. Afecto positivo limitado
      - 3. Episodios de irritabilidad, tristeza o miedo inexplicado que son evidentes incluso durante las interacciones no amenazadoras con los cuidadores adultos.
      - 1. Reacción social y emocional mínima a los demás.
    - - 1. El niño realmente o muy pocas veces busca consuelo cuando siente malestar.
      - 2. El niño raramente o muy pocas veces se deja consolar cuando siente malestar.
- - - - Malestar intenso desproporcionado a la gravedad o intensidad del factor de estrés, teniendo en cuenta el contexto externo y los factores culturales que podrían influir en la gravedad y la presentación de los síntomas.
      - Deterioro significativo de lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.
    - - F43.21 Con estado de ánimo deprimido: Predomina el estado de ánimo bajo, las ganas de llorar o el sentimiento de desesperanza.
      - F43.22 Con ansiedad: Predomina el nerviosismo, la preocupación, la agitación o la ansiedad de separación.
      - F43.23 Con ansiedad mixta y estado de ánimo deprimido: Predomina una combinación de depresión y ansiedad.
      - F43.24 Con la alteración de la conducta: Predomina la alteración de la conducta.
      - F43.25 Con alteración mixta de las emociones y la conducta: Predominan los síntomas emocionales (p.ej., depresión, ansiedad) y una alteración de la conducta.
      - F43.20 Para las reacciones de mala adaptación que no se pueden clasificar como uno de los subtipos específicos del trastorno de adaptación.
      - Agudo: Este especificador puede usarse para indicar que la persistencia kde los síntomas dura menos de 6 meses.
      - Persistente (Crónico): Puede usarse para indicar que la persistencia de los ´síntomas dura 6 meses o más. Por definición, los síntomas no pueden persistir más de 6 meses una vez ha desaparecido el factor estresante o sus consecuencias. Por tanto, se aplica cuando la duración de la perturbación es mayor de 6 meses en respuesta a un factor estresante crónico o a un factor estresante de consecuencias duraderas.
  - - - Los índices del trastorno de adaptación pueden ser más altos en las mujeres, según investigaciones de Dinamarca. En las consultas psiquiátricas australianas, canadienses. israelíes y estadounidenses, el trastorno de adaptación era a menudo el diagnóstico más frecuente en la década de 1990, llegando con frecuencia al 50%
  - - - Si el factor estresante o sus consecuencias persisten, el trastorno de adaptación podría continuar y se convertiría en la forma persistente. Si los síntomas persisten más allá de 6 meses después de desaparecer el factor estresante o sus consecuencias, ya no se aplicaría el diagnóstico de trastornos de adaptación.
  - - - Las personas con entornos de vidas desfavorecidos se ven sometidas a cotas elevadas de factores estresantes y podrían tener un mayor riesgo de padecer trastornos de adaptación.
  - - - Si una persona tiene síntomas que cumplen los criterios para un trastorno depresivo mayor en respuesta a un factor de estrés, no sería aplicable el diagnóstico de trastorno de adaptación. EL perfil de los síntomas diferencia el trastorno depresivo mayor de los trastornos de adaptación.
    - - En los trastornos de adaptación, el factor estresante puede ser de cualquier gravedad, en lugar de ser de la gravedad y el tipo requeridos por el criterio A del trastorno de estrés agudo y el trastorno de estrés postraumático. Para distinguir los trastornos de adaptación de estos dos diagnósticos postraumáticos se debe considerar el factor temporal y el perfil de los síntomas.
        
        Los trastornos de adaptación se pueden presentar de inmediato y puede persistir hasta 6 meses después de la exposición al evento traumático, mientras que el trastorno de estrés agudo solo puede ocurrir entre los 3 días y 1 mes de exposición al acontecimiento estresante, y el trastorno de estrés postraumático no se puede diagnosticar hasta que por lo menos ha pasado 1 mes desde la aparición del acontecimiento estresante traumático.
        
        Los perfiles de síntomas requeridos para el TEPT y el trastorno de estrés agudo los diferencian de los trastornos de adaptación. Con respecto al perfil de síntomas, se puede diagnosticar trastorno de adaptación tras un evento traumático cuando un individuo presenta síntomas del trastorno de estrés agudo o de estrés postraumático, pero estos no cumplen o sobrepasan el umbral de diagnóstico para cada trastorno.
        
        Como el trastorno de adaptación no puede persistir durante más de 6 meses después de desaparecer el factor estresante o sus consecuencias, los casos en que los síntomas se producen en respuesta a un suceso traumático sin alcanzar el umbral diagnóstico del TEPT y que persisten durante más de 6 meses deben de diagnosticarse de otro trastorno especificado relacionado con truamas y factores de estrés.
        
        También debe de diagnosticarse el trastorno de adaptación en las personas que no han estados expuestos a un suceso traumático propio del criterio A del TEPT, pero presentan el perfil sintomático completo del trastorno de estrés agudo o del TEPT.
    - - Algunas características de la personalidad pueden estar asociadas con una vulnerabilidad para la angustia situacional que puede parecerse a un trastorno de adaptación. Algunos trastornos de la personalidad pueden presentar vulnerabilidad para la angustia, y el estrés también puede exacerbar los síntomas del trastorno de personalidad.
        
        Cuando se presenta un trastorno de personalidad, si se cumplen los criterios de los síntomas de un trastorno adaptativo y la alteración relacionada con e estrés sobrepasa la que podría atribuir a los síntomas desadaptativos del trastorno de personalidad, entonces se debe de establecer el diagnóstico de trastorno de adaptación.
    - - El malestar agudo clínicamente significativo relacionado con una pérdida puede diagnosticarse a veces como trastorno de adaptación si la aflicción se considera desproporcionada con respecto a lo que cabría esperar o afecta de forma importante al autocuidado y las relaciones interpersonales.
        
        Cuando estos síntomas persisten durante más de 12 meses desde la muerte, el diagnóstico es de trastorno de duelo prolongado, si se cumplen todos los criterios, o de otro trastorno especificado relacionado con traumas y factores de estrés.
    - - Entre los factores psicológicos que influyen en otras afecciones médicas están las entidades psicológicas específicas (p.ej., los síntomas psicológicos, los comportamientos, otros factores) que pueden agravar una afección médica.
        
        Estos factores psicológicos pueden precipitar, exacerbar o poner a una persona en riesgo de desarrollar una enfermedad médica, o puede empeorar una afección existente. Por otra parte, un trastorno de adaptación es una reacción a un factor de estrés (p.ej., tener una enfermedad médica)
    - - La mayoría de las personas se altera cuando suceden cosas perjudiciales. Esto no sería un trastorno de adaptación. Solo se debe hacer diagnóstico cuando la magnitud de la angustia es superior a la que normalmente cabría esperar (que varía en las culturas), o cuando los acontecimientos adversos provocan un deterioro funcional.
  - - - Los trastornos de adaptación acompañan frecuentemente a las enfermedades médicas y pueden ser la principal repuesta psicológica a una afección médica,
- - - - Añoranza/anhelo intenso de la persona fallecida.
      - Intranquilidad por pensamientos o recuerdos de la persona fallecida 8en niños y adolescentes, la intranquilidad puede centrarse en las circunstancias de la muerte).
    - - Disrupción de la identidad (p.ej., sentir que ha muerto una parte de uno mismo) desde el fallecimeinto.
      - Sensación marcada de incredulidad ante la muerte.
      - Evitación de aquello que lleva a recordar que la persona ha muerto (en niños y adolescentes puede caracterizarse por intentos de evitar estos recordatorios).
      - Dolor emocional intenso (p.ej., ira, amargura, pena) en relación con el fallecimeinto.
      - Dificultad para reintegrarse en las relaciones y actividades propias tras la muerte (p.ej., problemas para reunirse con los amigos, dedicarse a los propios intereses o planificar el futuro).
      - Embotamiento afectivo (ausencia o reducción marcada de experiencias emocionales) a consecuencia del fallecimeinto.
      - Sensación de que la vida carece de sentido aa consecuencia del fallecimiento.
      - Soledad intensa a consecuencia del fallecimiento.
  - - - Las poblaciones con mayor exposición a los traumas podrían tener índices de prevalencia más elevados. La prevalencia media de los cuadros de duelo prolongado podría ser mayor en los países occidentales de rentas altas que en los países asiáticos de rentas altas y medias altas.
        
        En China han encontrado tasas mayores y variaciones considerables. La prevalencia del trastorno de duelo complejo persiste entre los jóvenes estadounidenses en situación de duelo en la comunidad se calculó que es del 18%.
  - - - El curso del trastorno de duelo prolongado puede complicarse con un trastorno de estrés postraumático concurrente, lo que sucede con mayor frecuencia en las situaciones de duelo que siguen a la muerte violenta de un ser querido, cuando la aflicción de la persona que está de luto puede acompañarse de una amenaza de muerte personal o de haber presenciado la muerte violenta u horripilante.
        
        La tercera edad puede asociarse a un mayor riesgo de presentar el trastorno tras la muerte de un ser querido. Las personas mayores con síntomas de trastorno de duelo prolongado pueden tener más riesgo de declive cognitivo progresivo. En los niños, el malestar puede expresarse en el juego y el comportamiento, en forma de regresiones del desarrollo y mediante conductas de ansiedad o protesta en los momentos de separación y reunión.
        
        Los niños pequeños pueden presentar síntomas de trastorno de duelo prolongado específicos a su corta edad. La pérdida de un cuidador principal puede ser traumática para un niño pequeño por los efectos desorganizante de su ausencia, ellos pueden protestar o enojarse cuando los cuidados cotidianos son diferentes a como lo hacía la persona fallecida.
        
        Los niños pequeños tienden a padecer manifestaciones somáticas como alteraciones del sueño, comida, digestión, y nivel de energía. Pueden expresar una inseguridad por el futuro, pueden buscar al fallecido al no entender la persistencia de la muerte. Expresan nostalgia en el pensamiento y el juego en forma de deseo.
        
        En los niños y en los adolescentes, la obsesión constante por las circunstancias de la muerte puede llevarlos a centrarse en aspectos negativos del deterioro físico a lo largo del curso de la enfermedad mortal y en la incapacidad del cuidador para llevar a cabo los cuidados más esenciales. La angustia de la separación puede predominar en los niños pequeños, mientras que el malestar por la ruptura de la identidad social y el riesgo de depresión concurrente pueden manifestarse cada vez más en los niños más mayores y los adolescentes.
        
        No alcanzar los hitos y transiciones del desarrollo propios de la edad es una manifestación de la incapacidad de retomar las funciones de vida. En los niños mayores y adolescentes, sentir que la vida carece de sentido sin la persona que ha muerto puede llevar a abandonar las aspiraciones del desarrollo a que den igual las conductas de riesgo o a sentir que el futuro se ha arruinado.
        
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  - - - El riesgo de tener síntomas del trastorno de duelo prolongado aumenta cuanto más se dependía del difunto en vida, cuando la muerte es de un niño, si la muerte fue violenta o inesperada y cuando existen factores de estrés económicos. El trastorno es más prevalente tras la muerte de un cónyuge, pareja o un hijo que tras la de otro tipo de pariente. Los problemas de falta de cuidador y de apoyo en los cuidados aumentan el riesgo del duelo infantil.
  - - - El trastorno de duelo prolongado se distingue del duelo normal por la presencia de reacciones de duelo graves que persisten durante al menos 12 meses (6 meses en los niños y los adolescentes) tras la muerte de una persona cercana al individuo de luto.
        
        El trastorno de duelo prolongado solo se diagnostica si la respuesta de duelo de nivel grave persiste durante el tiempo especificado tras la defunción, interfiere con la capacidad funcional del individuo y sobrepasa las normas culturales, sociales y religiosas. Al evaluar el requisito de que los síntomas clínicamente significativos estén presentes la mayoría de los días del último mes, debe tenerse en cuenta que el duelo normal puede observarse aumentos marcados de la gravedad en aquellas fechas que recuerdan la perdida.
    - - El trastorno de duelo prolongado, el trastorno depresivo mayor y el trastorno depresivo persistente comparten varios síntomas, como el ánimo decaído, el llanto y los pensamientos suicidas, sin embargo, en el trastorno de duelo prolongado el malestar está centrado en sentimientos de pérdida y separación de un ser querido, y no es reflejado de un ánimo bajo generalizado. El trastorno depresivo mayor también puede ir precedido de la muerte de un ser querido, con o sin trastorno de duelo prolongado concomitante.
    - - Los individuos en duelo por una muerte violenta o accidental pueden desarrollar un TEPT como un trastorno de duelo prolongado. Ambas entidades pueden comportar pensamientos intrusivos y evitación. Mientras que las intrusiones del TEPT giran en torno al suceso traumático, los recuerdos intrusivos del trastorno del duelo prolongado son pensamientos sobre muchos aspectos de la relación el fallecido, incluidos aspectos positivos de la relación y angustia por la separación.
        
        A diferencia de la evitación del TEPT, que consiste en evitar los pensamientos, recuerdos o sentimientos asociados al suceso traumático que condujo a la muerte del ser querido, en el trastorno de duelo prolongado lo que se evita son los recordatorios de que el ser querido ya no volverá a estar presente.
        
        Además, los recuerdos que recurren en el TEPT tienden a ser más perceptivos, refiriendo el individuo que es como si se estuvieran viviendo en el aquí y ahora, lo que tiende a no ser así en el trastorno de duelo prolongado. En el trastorno de duelo prolongado también hay añoranza del fallecimiento, aspecto que está ausente en el TEPT.
    - - El trastorno de ansiedad de separación se caracteriza por cursar con ansiedad en relación con la separación de las figuras de apego activas, mientras que el trastorno de duelo prolongado cursa con malestar por la separación de una persona fallecida.
    - - Las alucinaciones referidas al difunto o las sensaciones transitorias de que el difunto está presente son frecuentes en todas las culturas durante el duelo normal, pueden percibirse como un consuelo y suelen tener lugar cuando el individuo está queando dorrmido.
        
        Para merecer un diagnóstico de trastorno psicótico, los individuos con trastorno de duelo prolongado deben también presentar otros síntomas de psicosis, como delirio, pensamiento desorganizado o síntomas negativos.
  - - - El trastorno de ansiedad de separación en relación con importantes figuras de apego vivas puede ocurrir con los síntomas de trastorno de duelo prolongado.
- - - - Experiencia directa delsuceso (s) traumático (s).
      - Presencia directa del suceso(s) ocurrido(s) a otros.
      - Conocimiento de que el suceso (s) traumático (s) ha ocurrido a un familiar próximo o a un amigo íntimo. Nota: En los casos de amenaza o realidad de muerte de un familiar o amigo, el suceso (s) ha de haber violento o accidental.
      - Exposición repetida o extrema a detalles repulsivos del suceso(s) traumático(s) (p.ej., socorristas que recogen restos humanos; policías repetidamente expuestos a detalles del maltrato infantil). Nota: Esto no se aplica a la exposición a través de medios electrónicos, televisión, película o fotografía, a menos que esta exposición esté relacionada con el trabjo.
    - - Síntomas de intrusión
        
        Recuerdos angustiosos recurrentes, involuntarios e intrusivos del suceso(s) traumático(s). Nota: En los niños, se pueden producir juegos repetitivos en los que se expresen temas o aspectos del suceso(s) traumático (s).
        
        Sueños angustiosos recurrentes en los que el contenido y/o el afecto del sueño está relacionado con el suceso(s). Nota: En los niños, pueden existir sueños aterradores sin contenido reconocible.
        
        Reacciones disociativas (p.ej., escenas retrospectivas) en las que el individuo siente o actúa como si se repitiera el suceso(s) traumático(s). (Estas reacciones se pueden producir de forma continua, y la expresión más extrema es una pérdida completa de conciencia del entorno presente). Nota: En los niños, la representación específica del trauma puede tener lugar en el juego.
        
        Malestar psicológico intenso o prolongado, o reacciones fisiológicas importantes en respuesta a factores internos o externos que simbolizan o se parecen a un aspecto del suceso(s) traumático(s).
      - Estado de ánimo negativo
        
        Incapacidad persistente de experimentar emociones positivas (p.ej., felicidad, satisfaccióno sentimiento amoroso).
      - Síntomas disociativos
        
        Sentido de la realidad alterado del entorno o de uno mismo (p. ej., verse uno mismo desde la perspectiva de otro, estar pasmado, lentitud del tiempo).
        
        Incapacidad de recordar un aspecto importante del suceso(s) traumático(s) debido típicamente a amnesia disociativa, y no a otros factores como una lesión cerebral, alcohol o drogas).
      - Síntomas de evitación
        
        Esfuerzos para evitar recuerdos, pensamientos, o sentimientos angustiosos acerca o estrechamente asociados al suceso(s) traumático(s).
        
        Esfuerzos para evitar recordatorios externos (personas, lugares, conversaciones, actividades, objetos, situaciones) que despiertan recuerdos, pensamientos o sentimientos angustiosos acerca del o estrechamente asociados al suceso(s) traumático(s).
      - Síntomas de alerta
        
        Alteración del sueño (p.ej., dificultad para conciliar o continuar el sueño, o sueño inquieto).
        
        Comportamiento irritable y arrebatos de furia (con poca o ninguna provocación) que se expresa típicamente como agresión verbal o física contra personas u objetos).
        
        Hipervigilancia
        
        Problemas ocn la concentración.
        
        Respuestas de sobresalto exagerada.
  - - - En investigaciones en Reino Unido, Estados Unidos y Australia el trastorno de estrés agudo se identificó en menos del 20% de los casos después de un evento traumático sin agresión interpersonal. Normalmente se encuentran índices mayores (19-50%) después de sucesos traumáticos interpersonales (p. ej., agresión y violación)
  - - - La mitad de las personas que desarrollan el TEPT presentan inicialmente un trastorno de estrés agudo. Los análisis longitudinales indican que los síntomas de estrés agudo pueden remitir, permanecer constantes o empeorar con el tiempo, con frecuencia como resultado de los factores estresantes de la vida o a causa de más eventos traumáticos.
        
        Las formas de revivir el suceso traumático pueden variar según la etapa del desarrollo. En los niños pequeños se manifiesta a través de los sueños terroríficos con un contenido que refleja los aspectos del trauma. Los niños de 6 años o menores pueden reexperimentar, con más probabilidad que los niños de mayor edad, los ´síntomas de la experiencia traumática a través del juego, refiriéndose directamente o simbólicamente al trauma.
        
        Los niños pequeños no manifiestan necesariamente reacciones de miedo en el momento de la exposición o incluso durante la reexperimentación. Los padres por lo general informan de una serie de expresiones emocionales, como la ira, la vergüenza, o el retraimiento, e incluso un excesivo afecto positivo en los niños pequeños que están traumatizados.
        
        Aunque los niños pueden evitar aquellos lo que les recuerda al trauma, a veces se preocupan por los recordatorios (p.ej., un niño pequeño que sufre una mordedura por un perro puede hablar de los perros constantemente, pero puede evitar salir fuera por temor a encontrarse con uno).
  - - - Los factores de riesgo son el trastorno mental previo, altos niveles de respuestas emocionales negativas, como el ánimo depresivo y la ansiedad (también llamada afectividad negativa o neuroticismo), mayor gravedad percibida del evento traumático y un estilo de enfrentamiento evitativo. La tendencia a hacer apreciaciones catastróficas de la experiencia traumática, a menudo caracterizadas por estimaciones exageradas de daños futuros, culpa o desesperanza, es predictiva del trastorno de estrés agudo.
    - - Un individuo debe ser expuesto a un evento traumático para tener riesgo de presentar un trastorno de estrés agudo. Los factores de riesgo para la enfermedad son una historia de trauma anterior.
    - - Una reactividad elevada antes de la exposición al trauma aumenta el riesgo de desarrollar el trastorno de estrés agudo.
  - - - Como la violación, otras formas de violencia interpersonal y el trauma infantil, incluido el abuso sexual. Otros factores que pueden contribuir a la mayor prevalencia entre las mujeres son las diferencias de género en la forma emocional y cognitiva de procesar los traumas, diferencias neurobiológicas ligadas al sexo en cuanto a la respuesta al estrés, así como factores socioculturales.
  - - - En los trastornos de adaptación, el factor estresante puede ser de cualquier gravedad, y no solo de la gravedad y del tipo requerido para el criterio A del trastorno de estrés agudo. Un diagnóstico de un trastorno de adaptación se realiza cuando la respuesta a un evento del criterio A no cumple no cumple con los criterios de estrés agudo.
        
        Y cuando el patrón de síntomas del trastorno de estrés agudo se presenta en respuesta a un factor estresante que no cumple con el criterio A para la exposición a la muerte real o a la amenaza, las lesiones graves o a la violencia grave.
        
        Algunas formas de respuesta de estrés agudo no incluyen los síntomas del trastorno de estrés agudo y se pueden caracterizar por la ira, la depresión o la culpabilidad. Las respuestas depresivas o de ira en un trastorno de adaptación pueden implicar la rumiación del evento traumático, en oposición a los recuerdos intrusos e involuntarios que provocan malestar en el trastorno de estrés agudo.
    - - Los ataques de pánico espontáneos son muy comunes en el trastorno de estrés agudo. Sin embargo, el trastorno de pánico solo se diagnostica si los atauques de pánico son inesperados, si existe ansiedad por los ataques futuros o si se aprecian cambios desadaptativos en el comportamiento asociado al miedo a las nefastas consecuencias de los ataques.
    - - Las respuestas disociativas graves (en ausencia de los síntomas caracterizados del estrés agudo) se pueden diagnosticar como un trastorno de desrealización/despersonalización. Si persiste la amnesia grave del trauma en ausencia de los síntomas característicos del trastorno de estrés agudo, podría estar indicado el diagnóstico de amnesia disociativa.
    - - El trastorno de estrés agudo se distingue del trastorno de estrés postraumático en que los síntomas del trastorno de estrés agudo deben de resolverse dentro del primer mes del suceso traumático y resolverse dentro de ese período de 1 mes. Si los síntomas persisten durante más de 1 mes y se cumplen los criterios para el TEPT, se cambiará el diagnóstico de trastorno de estrés agudo a TEPT.
    - - En el trastorno obsesivo-compulsivos son recurrentes los pensamientos intrusivos, pero estos cumplen la definición de obsesiones. Además, los pensamientos intrusivos no están relacionados con un evento traumático experimentado, suele haber compulsiones y no aparecen los otros síntomas del trastorno de estrés agudo.
    - - Las memorias retrospectivas en el trastorno de estrés agudo deben de distinguirse de los delirios, de las alucinaciones y de otros trastornos de la percepción que pueden aparecer en la esquizofrenia, en otros trastornos psicóticos, en el trastorno depresivo o bipolar con síntomas psicóticos, en el delirium, en los trastornos inducidos por medicación o por sustancias y en los trastornos psicóticos debido a otra afección médica.
        
        Los flashbacks en el trastorno de estrés agudo se distinguen de estos trastornos perceptivos en que se relacionan directamente con la experiencia traumática y en que aparecen en ausencia de otras características psicóticas o inducidas por sustancias.
    - - Cuando una lesión cerebral se produce en el contexto de un evento traumático pueden aparecer síntomas del trastorno de estrés agudo. Un traumatismo craneal también puede constituir un acontecimiento traumático psicológicos, y los ´síntomas neurocognitivos relacionados a la lesión cerebral traumática y los de trastorno de estrés agudo no son mutuamente excluyentes y pueden aparecer al mismo tiempo.
        
        Debido a que los síntomas de trastorno estrés agudo y los síntomas neurocognitivos relacionados con las lesiones cerebrales traumáticas pueden superponerse, se podría hacer un diagnóstico diferencial entre el trastorno de estrés agudo y los síntomas del trastorno neurocognitivo atribuibles a la lesión cerebral traumática basándose en la presencia de los síntomas que son característicos de cada presentación.
        
        Así, la reexperimetnación y la evitación son característicos del trastorno de estrés agudo, y no de la lesión cerebral traumática, y de la desorientación persistente y la confusión son más específicos de la lesión cerebral traumática que el de trastorno de estrés agudo. Además, al diagnóstico diferencial le ayuda el hecho de que los síntomas del trastorno de estrés agudo persisten durante un máximo de 1 mes después de la exposición al trauma.
- - - - Ambientales
        
        Son la gravedad (dosis) del trauma, el peligro vital percibido, las lesiones personales, la violencia interpersonal y, para el personal militar, ser autor o testigo de atrocidades, o matar al enemigo.
    - - Temperamentales
        
        Son las evaluaciones negativas, las estrategias de afrontamiento inadecuadas y el desarrollo de un trastorno de estrés agudo.
      - Ambientales
        
        Son la posterior exposición a recuerdos molestos repetitivos, a acontecimientos adversos posteriores y a pérdidas relacionadas con traumas financieros o de otra índole.
    - - Ambientales
        
        Son un bajo nivel socioeconómico, una educación escasa, la exposición a un trauma previo, la adversidad en la niñez, las características culturales, una deficiencia de inteligencia, una condición racial/étnica minoritaria y una historia psiquiátrica familiar.
      - Genéticos y fisiológicos
        
        El riesgo de tener un TEPT después de una experiencia traumática se ha demostrado que es modestamente heredable en estudios de gemelos y oleculares.
      - Temperamentales
        
        Son los problemas emocionales de la infancia en torno a la edad de 6 años y los trastornos mentales previos
  - - - Con frecuencia, la reacción de un individuo a un trauma inicialmente cumple con los criterios para el trastorno de estrés agudo en el período inmediatamente posterior al trauma. La duración de los síntomas varía, con una recuperación completa a los 3 meses en aproximadamente la mitad de los adultos, mientras que otras personas permanecen sintomáticas durante más de 12 meses y a veces durante más de 50 años.
        
        Los niños de 6 y menos años pueden desarrollar TEPT a consecuencia de maltratos emocionales graves, que pueden percibirse como potencialmente mortales. Los niños pequeños son más propensos a reexperimentar los síntomas a través del juego, haciendo este referencia directa o simbólica al trauma. Los padres pueden comunicar una amplia variedad de cambios emocionales o de comportamiento en los niños pequeños.
        
        Los niños pueden centrarse en las intervenciones imaginarias de su juego o en la narración de las historias. Además de las evitaciones, los niños pueden llegar a preocuparse por los recuerdos. Debido a las limitaciones de los niños pequeños para expresar los pensamientos o para clasificar las emociones, las alteraciones negativas del estado de ánimo o de la cognición tienden a manifestarse principalmente como cambios de humor.
        
        En los niños pequeños, la conducta evasiva se puede asociar a restricciones del juego o las conductas exploratorias; en los niños de edad escolar, con una participación reducida en las actividades nuevas, y en los adolescentes, con resistencia a buscar oportunidades de desarrollo. Los niños y los adolescentes pueden juzgarse a sí mismos como cobardes.
        
        Los adolescentes pueden creer que se están volviendo socialmente indeseables y se alejan de sus compañeros. El comportamiento irritable o agresivo en los niños y los adolescentes puede interferir en las relaciones entre compañeros y en el comportamiento escolar. Un comportamiento imprudente puede ocasionar lesiones accidentales a sí mismo o a los demás, la búsqueda de emociones fuertes o conductas de alto riesgo.
        
        En los individuos mayores, el trastorno se asocia a percepciones negativas de la salud, uso exagerado de la atención primaria y pensamientos suicidas. Además, la mala salud, el empeoramiento de la función cognitiva y el asilamiento social pueden exacerbar los síntomas del TEPT.
  - - - A diferencia del TDAH, donde los problemas de atención, concentración y aprendizaje deben haber comenzado antes de los 12 años de edad, en el TEPT los síntomas debutan tras la exposición a un suceso traumático del criterio A,
        
        En el TEPT, las interrupciones de la atención y la concentración del individuo pueden atribuirse a la alerta frente al peligro y las respuestas de sobresalto exageradas a los recordatorios del trauma.
    - - La dificultades interpersonales que tuvieron su inicio o que se exacerbaron considerablemente después de la exposición a un evento traumático indicarían un trastorno de estrés postraumático, en lugar de un trastorno de la personalidad, en el que se considera que tales dificultades son independientes de la exposición traumática.
    - - La depresión mayor puede o no estar precedida de un evento traumático y se debería diagnosticar si no existen otros síntomas de TEPT. En concreto, los principales trastornos depresivos no tienen ningún síntoma de los criterios B o C del TEPT.
        
        Tampoco incluye síntomas del los criterios D o E del TEPT. Sin embargo, si también se cumplen plenamente los criterios del TEPT, pueden asignarse ambos diagnósticos.
    - - La amnesia disociativa, el trastorno de identidad disociativo y el trastorno de despersonalización-desrealización pueden o no estar precedidos por la exposición a un evento traumático o pueden o no producir conjuntamente los síntomas de TEPT. Cuando se manifiestan los criterios del TEPT completo, se debería considerar el trastorno de estrés postraumático subtipo "con síntomas disociativos".
    - - En el TOC hay pensamientos intrusivos recurrentes, pero éstos cumplen la definición de obsesión. Además, los pensamientos intrusivos no están relacionados con un evento traumático experimentado, suelen existir compulsiones, y suelen estar ausentes los otros síntomas del trastorno de estrés postraumático o trastorno de estrés agudo.
        
        Ni la excitación y los síntomas disociativos del trastorno de pánico, ni la evitación, la irritabilidad y la ansiedad del trastorno de ansiedad generalizada se asocian con un evento traumático específico.
        
        os síntomas del trastorno de ansiedad de separación están claramente relacionados con la separación del hogar o de la familia, en lugar de con un evento traumático.
    - - Una aparición de síntomas somáticos en el contexto de una angustia postraumática podría ser un indicio de trastorno de estrés postraumático, en lugar de un trastorno de síntomas neurológicos funcionales.
    - - El trastorno de estrés agudo se distingue del trastorno de estrés postraumático debido a que el patrón de los síntomas en el trastorno de estrés agudo se limita a una duración de entre 3 días y 1 mes después de la exposición al evento traumático.
    - - Las memorias retrospectivas (flashbacks) en el TEPT se deben distinguir de las ilusiones, alucinaciones y de otros trastornos de la percepción que pueden aparecer en la esquizofrenia, el trastorno psicótico breve y en otros trastornos psicóticos, en los trastornos depresivos y bipolares con características psicóticas, en el delirium, en los trastornos inducidos por sustancias/ medicamentos, y en los trastornos psicóticos debidos a otra afección médica.
        
        Las escenas retrospectivas del TEPT se distinguen de estas otras alteraciones de la percepción en que están directamente relacionadas con la experiencia traumática y en que ocurren en ausencia de otras características psicóticas inducidas por sustancias.
    - - El diagnóstico requiere que la exposición al trauma preceda a la aparición o a la exacerbación de los síntomas pertinentes. Por otra parte, si el patrón sintomatológico de respuesta al factor estresante extremo cumple con los criterios para otro trastorno mental, se deberían aplicar estos diagnósticos en lugar o además del diagnóstico de trastorno de estrés postraumático.
        
        Se pueden excluir otros diagnósticos y afecciones cuando los síntomas se explican mejor por un trastorno de estrés postraumático
    - - Algunos tipos de sucesos traumáticos aumentan el riesgo de tener tanto TEPT como una lesión cerebral traumática, ya que pueden producir lesiones craneoencefálicas. Los individuos con TEPT que también tienen una LCT pueden tener síntomas posconmocionales persistentes.
        
        Debido a que los síntomas del TEPT y los síntomas neurocognitivos relacionados con la LCT pueden superponerse, es posible que se tenga que realizar un diagnóstico diferencial, entre el TEPT y los síntomas del trastorno neurocognitivo atribuibles a la lesión cerebral traumática, basándose en la presencia de los síntomas distintivos de cada presentación.
        
        Mientras que la reviviscencia y la evitación son características del TEPT, y no de los efectos de la LCT, la desorientación persistente y la confusión son mas específicas de la LCT que del TEPT.
        
        Los problemas de memoria concernientes al suceso traumático que están relacionados con la LCT son típicamente atribuibles a la imposibilidad de codificar la información a causa de la lesión, mientras que los problemas de memoria del TEPT reflejan típicamente una amnesia disociativa.
    - - En los trastornos de adaptación, el factor estresante puede ser de cualquier gravedad, y no sólo de la requerida para el trastorno de estrés postraumático (Criterio A). El diagnóstico de un trastorno de adaptación se utiliza cuando la respuesta a un factor estresante, que cumpla con el Criterio A del TEPT, no cumple todos los demás criterios de TEPT.
        
        También se diagnostica trastorno de adaptación cuando el patrón de síntomas del trastorno de estrés postraumático se produce como respuesta a un factor de estrés que no cumple con el Criterio A del TEPT (p. ej., el abandono por parte del cónyuge, ser despedido).
  - - - En las poblaciones afectadas por conflictos de todo el mundo, la prevalencia puntual del TEPT con deterioro funcional es del 11% después de ajustar las diferencias de edad entre los estudios.
        
        Los índices de trastorno de estrés postraumático son más altos entre los veteranos y otras personas cuya profesión tiene un riesgo de exposición traumática elevado . Las tases más altas se encuentran entre los supervivientes de violación, combate militar, cautiverio e internamiento y genocidio por causas políticas o étnicas.
        
        La prevalencia del trastorno de estrés postraumático puede variar a lo largo del desarrollo. Los niños y los adolescentes, incluidos los niños en edad preescolar, generalmente muestran una prevalencia menor después de una exposición a eventos traumáticos graves; sin embargo, esto puede deberse a que los criterios anteriores no están suficientemente informados según el desarrollo.
  - - - F. La duración de la alteración (Criterios B, C, D y E) es superior a 1 mes.
      - G. La alteración causa malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.
      - E. Alteración importante de la alerta y reactividad asociada al suceso(s) traumático(s), que comienza o empeora después del suceso(s) traumático(s), como se pone de manifiesto por dos (o más) de las características siguientes:
        
        3. Hipervigilancia
        
        4. Respuesta de sobresalto exagerada
        
        2. Comportamiento imprudente o autodestructivo.
        
        5. Problemas de concentración
        
        1. Comportamiento irritable y arrebatos de furia (con poca o ninguna provocación) que se expresan típicamente como agresión verbal o física contra personas u objetos.
        
        6. Alteración del sueño (p. ej., dificultad para conciliar o continuar el sueño, o sueño inquieto).
      - H. La alteración no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia (p. ej., medicamento, alcohol) o a otra afección médica.
      - D. Alteraciones negativas cognitivas y del estado de ánimo asociadas al suceso(s) traumático(s), que comienzan o empeoran después del suceso(s) traumático(s), como se pone de manifiesto por dos (o más) de las características siguientes:
        
        4. Estado emocional negativo persistente (p. ej., miedo, terror, enfado, culpa o vergüenza).
        
        5. Disminución importante del interés o la participación en actividades significativas.
        
        3. Percepción distorsionada persistente de la causa o las consecuencias del suceso(s) traumático(s) que hace que el individuo se acuse a sí mismo o a los demás.
        
        6. Sentimiento de desapego o extrañamiento de los demás.
        
        2. Creencias o expectativas negativas persistentes y exageradas sobre uno mismo, los demás o el mundo (p. ej., "Estoy mal", "No puedo confiar en nadie", "El mundo es muy peligroso", "Tengo los nervios destrozados").
        
        7. Incapacidad persistente de experimentar emociones positivas (p. ej., felicidad, satisfacción o sentimientos amorosos).
        
        1. Incapacidad de recordar un aspecto importante del suceso(s) traumático(s) (debido típicamente a amnesia disociativa y no a otros factores como una lesión cerebral, alcohol o drogas).
      - Especificar si:
        
        Con síntomas disociativos: Los síntomas cumplen los criterios para el trastorno de estrés postraumático y, además, en respuesta al factor de estrés, el individuo experimenta síntomas persistentes o recurrentes de una de las características siguientes:
        
        1. Despersonalización: Experiencia persistente o recurrente de un sentimiento de desapego y como si uno mismo fuera un observador externo del propio proceso mental o corporal.
        
        2. Desrealización: Experiencia persistente o recurrente de irrealidad del entorno.
        
        Nota: Para utilizar este subtipo, los síntomas disociativos no se han de poder atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia.
      - C. Evitación persistente de estímulos asociados al suceso(s) traumático(s) que comienza tras el suceso(s) traumático(s), como se pone de manifiesto por una o las dos características siguientes:
        
        1. Evitación o esfuerzos para evitar recuerdos, pensamientos o sentimientos angustiosos acerca o estrechamente asociados al suceso(s) traumático(s).
        
        2. Evitación o esfuerzos para evitar recordatorios externos (personas, lugares, conversaciones, actividades, objetos, situaciones) que despiertan recuerdos, pensamientos o sentimientos angustiosos acerca o estrechamente asociados al suceso(s) traumático(s).
      - Especificar si:
        
        Con expresión retardada: Si la totalidad de los criterios diagnósticos no se cumplen hasta al menos seis meses después del acontecimiento (aunque el inicio y la expresión de algunos síntomas puedan ser inmediatos).
      - B. Presencia de uno (o más) de los síntomas de intrusión siguientes asociados al suceso(s) traumático(s), que comienza después del suceso(s) traumático(s):
        
        3. Reacciones disociatívas (p. ej., escenas retrospectivas) en las que el sujeto siente o actúa como si se repitiera el suceso(s) traumático(s). (Estas reacciones se pueden producir de forma continua, y la expresión más extrema es una pérdida completa de conciencia del entorno presente.)
        
        Nota: En los niños, la representación específica del trauma puede tener lugar en el juego.
        
        4. Malestar psicológico intenso o prolongado al exponerse a factores internos o externos que simbolizan o se parecen a un aspecto del suceso(s) traumático(s).
        
        2. Sueños angustiosos recurrentes en los que el contenido y/o el afecto del sueño está relacionado con el suceso(s) traumático(s).
        
        Nota: En los niños, pueden existir sueños aterradores sin contenido reconocible.
        
        5. Reacciones fisiológicas intensas a factores internos o externos que simbolizan o se parecen a un aspecto del suceso(s) traumático(s).
        
        1. Recuerdos angustiosos recurrentes, involuntarios e intrusivos del suceso traumático.
        
        Nota: En los niños mayores de 6 años, se pueden producir juegos repetitivos en los que se expresen temas o aspectos del suceso(s) traumático(s).
      - A. Exposición a la muerte, lesión grave o violencia sexual, ya sea real o amenaza, en una (o más) de las formas siguientes:
        
        3. Conocimiento de que el suceso(s) traumático(s) ha ocurrido a un familiar próximo o a un amigo íntimo. En los casos de amenaza o realidad de muerte de un familiar o amigo, el suceso(s) ha de haber sido violento o accidental.
        
        4. Exposición repetida o extrema a detalles repulsivos del suceso(s) traumático(s).
        
        2. Presencia directa de suceso(s) ocurrido(s) a otros.
        
        Nota: El criterio A4 no se aplica a la exposición a través de medios electrónicos, televisión, películas o fotografías, a menos que esta exposición esté relacionada con el trabajo.
        
        1. Experiencia directa del suceso(s) traumático(s).
    - - E. La duración de la alteración es superior a 1 mes
      - F. La alteración causa malestar clínicamente significativo o problemas en la relación con los padres, hermanos, compañeros u otros cuidadores, o en el comportamiento en la escuela.
      - D. Alteración importante de la alerta y reactividad asociada al suceso (s) traumático(s), que comienza o empeora después del suceso(s) traumático(s), como se pone de manifiesto por dos (o más) de las características siguientes:
        
        3. Respuestas de sobresalto exagerada
        
        4. Problemas de concentración
        
        2. Hipervigilancia
        
        5. Alteración del sueño
        
        1. Comportamiento irritable y arrebatos de furia (con poca o ninguna provocación) que se expresa típicamente como agresión verbal o física contra personas u objetos (incluidas pataletas extremas).
      - G. La alteración no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia (p. ej., medicamento o alcohol) u otra afección médica.
      - C. Ha de estar presente uno (o más) de los síntomas siguientes, que representan evitación persistente de los estímulos asociados al suceso(s) traumático(s) o alteración cognitiva y del estado de ánimo asociada al suceso(s) traumático(s), que comienza o empeora después del suceso(s)
        
        Evitación persistente de los estímulos
        
        1. Evitación o esfuerzos para evitar actividades, lugares o recordatorios físicos que despiertan el recuerdo del suceso(s) traumático(s).
        
        2. Evitación o esfuerzos para evitar personas, conversaciones o situaciones interpersonales que despiertan el recuerdo del suceso(s) traumático(s).
        
        Alteración cognitiva
        
        4. Disminución importante del interés o la participación en actividades significativas, que incluye disminución del juego.
        
        5. Comportamiento socialmente retraído.
        
        3. Aumento importante de la frecuencia de estados emocionales negativos (p. ej., miedo, culpa, tristeza, vergüenza, confusión).
        
        6. Reducción persistente de la expresión de emociones positivas.
      - Especificar si:
        
        Con síntomas disociativos: Los síntomas cumplen los criterios para el trastorno de estrés postraumático y el individuo experimenta síntomas persistentes o recurrentes de uno de los cuadros siguientes:
        
        Despersonalización: Experiencia persistente o recurrente de un sentimiento de desapego, y como si uno mismo fuera un observador externo del propio proceso mental o corporal (p. ej., como si se soñara, sentido de irrealidad de uno mismo o del propio cuerpo, o de que el tiempo pasa despacio).
        
        Desrealización: Experiencia persistente o recurrente de irrealidad del entorno (p. ej., el mundo alrededor del individuo se experimenta como irreal, como en un sueño, distante o distorsionado).
        
        Nota: Para utilizar este subtipo, los síntomas disociativos no se han de poder atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia (p. ej., desvanecimiento) u otra afección médica (p. ej., epilepsia parcial compleja).
      - B. Presencia de uno (o más) de los síntomas de intrusión siguientes asociados al suceso(s) traumático(s), que comienza después del suceso(s) traumático(s):
        
        3. Reacciones disociatívas (p. ej., escenas retrospectivas) en las que el sujeto siente o actúa como si se repitiera el suceso(s) traumático(s). (Estas reacciones se pueden producir de forma continua, y la expresión más extrema es una pérdida completa de conciencia del entorno presente.) La representación específica del trauma puede tener lugar en el juego.
        
        4. Malestar psicológico intenso o prolongado al exponerse a factores internos o externos que simbolizan o se parecen a un aspecto del suceso(s) traumático(s).
        
        2. Sueños angustiosos recurrentes en los que el contenido y/o el afecto del sueño está relacionado con el suceso(s) traumático(s).
        
        Nota: Puede resultar imposible determinar que el contenido aterrador está relacionado con el suceso traumático
        
        5. Reacciones fisiológicas importantes a los recordatorios del suceso(s) traumático(s).
        
        1. Recuerdos angustiosos recurrentes, involuntarios e intrusivos del suceso traumático.
        
        Nota: Los recuerdos espontáneos e intrusivos pueden no ser necesariamente angustiosos y se pueden expresar como recreación en el juego.
      - Especificar si:
        
        Con expresión retardada: Si la totalidad de los criterios diagnósticos no se cumplen hasta al menos seis meses después del acontecimiento (aunque el inicio y la expresión de algunos síntomas puedan ser inmediatos).
      - A. En niños menores de 6 años, exposición a la muerte, lesión grave o violencia sexual, ya sea real o amenaza, en una (o más) de las formas siguientes:
        
        2. Presencia directa de suceso(s) ocurrido(s) a otros, especialmente a los cuidadores primarios.
        
        3. Conocimiento de que el suceso(s) traumático(s) ha ocurrido a uno de los padres o cuidadores
        
        1. Experiencia directa del suceso(s) traumático(s).
- - - - Esto se hace registrando ¨Otro trastorno relacionado con traumas y factores de estrés especificados¨ seguido del motivo específico (p. ej., respuesta persistente a un trauma con síntomas similares a los del TEPT).
- - - - Reducción o ausencia de reticencia para aproximarse e interaccionar con adultos extraños.
      - Comportamiento verbal o físico demasiado familiar (que no concuerda con lo aceptado culturalmente y con los límites sociales apropiados a la edad).
      - Recurre poco o nada al cuidador adulto después de una salida arriesgada, incluso en contextos extraños.
      - 4.Disposición a irse con un adulto extraño con poca o ninguna vacilación.
    - - Negligencia o carencia social que se manifiesta por la falta persistente de tener cubiertas las necesidades emocionales básicas para disponer de bienestar, estímulo y afecto por parte de los cuidadores adultos.
      - Cambios repetidos de los cuidadores primarios que reducen la oportunidad de a elaborar un apego estable (p.ej., cambios frecuentes de la custodia).
      - Educación en contextos no habituales que reducen en gran manera la oportunidad de establecer un apego selectivo (p.ej., instituciones con número elevado de niños por cuidador).
    - - Persistente: El trastorno ha estado presente durante más de 12 meses.
    - - El trastorno de relación social desinhibido se especifica como grave cuando un niño tiene todos los síntomas del trastorno y todos ellos se manifiestan en un grado relativamente elevado.
  - - - En las comunidades de rentas bajas del Reino Unido, la prevalencia llega a ser del 2%.
  - - - Si se produce un abandono temprano y aparecen los signos del trastorno, las características clínicas serán estables con el tiempo. Los signos del trastorno se han descrito desde el segundo año de vida hasta la adolescencia entre los niños criados en entornos institucionales.
        
        Existen diferencias en las manifestaciones del trastorno entre la primera infancia y las edades posteriores. Hay niños pequeños que tienen el trastorno y no muestran reticencia a acercarse, a interactuar e incluso a acompañar a adultos desconocidos sin vacilar.
        
        La familiaridad excesiva verbal y física permanece durante la infancia media, acompañada de expresiones no genuinas de emoción. En la adolescencia, el comportamiento indiscriminado puede extenderse a los compañeros. Los adolescentes con el trastorno tienen relaciones con los compañeros más superficiales y más conflictos entre iguales.
        
        Las manifestaciones adultas del trastorno parecen ser similares, pero pueden incluir transparencia personal excesiva y menos diferenciación entre conocidos y extraños.
  - - - Hay estudios que han hallado evidencia de que las conductas sociales indiscriminadas se asocian a sensibilidad embotada a las recompensas y disminución del control inhibido.
    - - La negligencia social grave es un requisito diagnóstico para el trastorno de relación social desinhibida. Los estudios han hallado una asociación entre la negligencia y los rasgos del trastorno.
        
        También se han implicado otros factores como las múltiples rupturas del acogimiento, el trastorno de la personalidad límite en la madre, los cuidados aberrantes y la atención de poca calidad. Contribuyen al cuidado insuficiente. Aun así, la mayoría de los niños con abandono grave no desarrollan el trastorno.
        
        El trastorno no se ha identificado en niños que solo sufren abandono social después de los 2 años de edad. EL pronóstico solo se asocia con la calidad del entorno de cuidado posterior al abandono grave. En muchos casos, el trastorno persiste incluso en los niños cuyo entorno de cuidado posterior mejora notablemente.
    - - Diversos factores neurobiológicos se han asociado a síntomas del trastorno, pero los hallazgos concernientes a al naturaleza de dichos factores y su vínculo específico con el trastorno siguen siendo preliminares.
    - - La calidad del cuidador parece moderar el curso del trastorno de relación social desinhibida, al menos en los niños más pequeños. Sin embargo, incluso después de ubicarlos en un ambiente normal de cuidados, algunos niños siguen mostrando signos persistentes de enfermedad, por lo menos hasta la adolescencia y la etapa adulta.
  - - - Los niños con trastorno de relación social desinhibida se pueden distinguir de aquellos otros con TDAH acompañado de impulsividad social en que los primeros no muestran hiperactividad o dificultades en la atención.
  - - - En los niños más pequeños y durante la infancia media, el trastorno de realción social desinhibida suele acompañar al TDAH y los trastornos externalizantes; se han sugerido que esta concurrencia estaría relacionada con deterioros comunes en el control cognitivo inhibido.