El capítulo menciona que el reforzamiento llega a aumentar la frecuencia de un comportamiento en la persona, ya que también influye en otros aspectos como la duración, la intensidad y la latencia. Un ejemplo, un niño que solo tiene permitido jugar después de realizar sus tareas durante 30 minutos, puede que trabaje su tarea durante ese periodo de tiempo. De igual forma si se necesita más fuerza para poder abrir una puerta que está atascada, la respuesta aumenta. También mencionar que si un niño llega a recibir un reforzador por atender rápidamente a sus padres, la rapidez de su respuesta será más óptima.