Las características principales que permiten delimitar conceptualmente las obsesiones.
• Carácter intrusivo: son pensamientos que irrumpen de forma involuntaria y súbita en el flujo normal del pensamiento consciente.
• Pueden tomar forma de imagen mental, impulso y/o pensamiento
• Son repetitivas o recurrentes
• No son evocadas de forma voluntaria: la persona no desea pensar en ellas.
• La persona las valora o juzga como inaceptables, se resiste activamente a su presencia, lo que da lugar, en muchas ocasiones, a esfuerzos activos y voluntarios de suprimirlas, de eliminarlas de la corriente.
• Repercuten de forma negativa en el estado de ánimo, porque resultan muy molestas Y desagradables, La consecuencia emocional típica ante una idea obsesiva es la ansiedad, pero también están presentes otras emociones negativas: ira, enfado con uno mismo, tristeza intensa e, incluso sentimiento de culpa.
• Se resiste activamente a su presencia, lo que da lugar, en muchas ocasiones, a esfuerzos activos y voluntarios de suprimirlas, de eliminarlas de la corriente.
• Repercuten de forma negativa en el estado de ánimo, porque resultan muy molestas y desagradables. La consecuencia emocional típica ante una idea obsesiva es la ansiedad, pero también están presentes otras emociones negativas: ira, enfado con uno mismo, tristeza intensa e, incluso, sentimientos de culpa
• La persona reconoce que la idea obsesiva no tiene sentido, que es irracional: sabe que no es posible que suceda lo que piensa sólo por pensarlo. Por eso en muchas ocasiones considera que son ideas absurdas.