La relevancia del CO reside en la capacidad que este fenómeno ha demostrado tener de afectar una amplia gama de fenómenos organizacionales como: compromiso, implementación de procesos de cambio, presentación del comportamiento éticos y la disminusión de conductas de acoso psicológico, menor presentación de factores de riesgo psicosocial, la satisfacción, creatividad, intención de permanencia, calidad y buen servicio, las relaciones interpersonales, desempeño, etc.