En la antigua China, se notó que aquellos que habían padecido viruela en su niñez no la adquirían más adelante. Esto llevó a la práctica de la variolización, un precursor de la vacunación, que involucraba la exposición a una forma atenuada del virus para inducir inmunidad. Esta práctica, aunque efectiva, tenía riesgos significativos, como la transmisión de otras enfermedades.
-