Las mercancías que ingresan a los Estados Unidos deben atravesar varias etapas antes de ser despachadas en la aduana. Estas etapas incluyen: un proceso de entrada, una inspección de contenido y documentación, una clasificación arancelaria, una determinación del arancel a pagar, y, finalmente, la liquidación del aranceles correspondiente.
Los importadores de mercancías a los Estados Unidos deben entregar un formulario de entrada al director del Servicio de Aduanas ("US Customs Service") del puerto correspondiente dentro de los cinco días hábiles siguientes a la llegada del envío al puerto.
El Servicio de Aduanas de los Estados Unidos también exige que el importador presente una fianza, normalmente por un monto que cubra el valor del envío, además de los derechos y tasas correspondientes.
La FDA, Administración de Alimentos y Medicamentos, es la agencia federal encargada de asegurar que los alimentos sean seguros, saludables e higiénicos.
Los envíos de carnes y aves se mantendrán bajo fianza y estarán sujetos a la retención por parte del Servicio de Aduanas hasta que el FSIS (Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria) notifique los resultados de su reinspección.
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