Henry Fayol, conocido por su Teoría Clásica de la Administración, destacó la planeación como una etapa crucial del proceso administrativo. Esta etapa implica establecer estrategias para alcanzar los objetivos empresariales, mejorando la productividad y el éxito comercial. La planeación debe ser flexible, eficiente, racional, responsable y factible. Existen varios tipos de planeación: estratégica (largo plazo), táctica (corto plazo), interactiva (previsión), normativa (reglas) y operativa (gestión de recursos). Los elementos clave de la planeación incluyen visión, misión, resultados esperados, acciones específicas, políticas y recursos necesarios.