Chile es conocido por su gran diversidad de paisajes naturales debido a su extensa longitud y variada topografía, que abarca desde el árido Desierto de Atacama en el norte, pasando por la cordillera de los Andes, hasta los frondosos bosques y fiordos del sur, y las vastas extensiones de la Patagonia. Estos paisajes no solo son visualmente impresionantes, sino que también son fundamentales para la biodiversidad y el equilibrio ecológico.