Esta variación se debe principalmente a las diferencias en productividad, es decir, la cantidad de bienes y servicios producidos por hora de trabajo. En países con alta productividad, los ciudadanos disfrutan de un nivel de vida superior. La mejora en el nivel de vida a lo largo del tiempo también se vincula al aumento de productividad. Por lo tanto, para elevar el nivel de vida, las políticas públicas deben centrarse en mejorar la productividad mediante una mejor educación, herramientas adecuadas y acceso a tecnología avanzada.