La Administración en la actualidad debe actuar sobre la base de valores como la colaboración efectiva y el reconocimiento de la diversidad cultural, y el entendimiento pleno de los problemas y desafíos cruciales, como los que representa la pobreza, la desigualdad, la inseguridad ciudadana, el cambio climático y la debilidad de las instituciones públicas, para de esta forma poder contribuir a sus soluciones, según lo demanda la sociedad.