Alimentación:La dieta del ganado afecta significativamente el contenido y la composición de grasa, afectando el sabor y la calidad higiénica de la carne. Esta característica influye en los diferentes estilos de alimentación (pasto al aire libre, pastoreo suplementario, forraje intensivo o alimento concentrado) y niveles de alimentación (ricos en energía, restringidos o facultativos). Una dieta, ya sea a base de cereales o pasto, no afecta los niveles de colesterol muscular. El tiempo de acabado mejora la ternura de la carne sin afectar la palatabilidad, el sabor y el contenido de colágeno. Los niveles de energía de la dieta tienen diferentes efectos sobre el contenido de colágeno y la solubilidad, afectando la firmeza de la carne. En animales jóvenes, el contenido de hierro en la dieta mejora el color de la carne. Los animales alimentados con pasto generalmente producen carne con más ácidos grasos omega-3, menos grasas saturadas, un sabor herbáceo más rico, etc., y niveles más altos de vitaminas A, E, B y minerales como hierro, zinc y selenio. . Por el contrario, los animales alimentados con cereales producen carne con mayor contenido de grasa, sabor más suave y cambios de color debido a la mioglobina. Una nutrición adecuada ayuda a mejorar la jugosidad, el sabor y la ternura de la carne(Ramírez et al., 2022).