La mayoría de las personas son amables y obedientes a la ley, sin embargo, hay pocas personas que lamentablemente no lo son y sus intenciones no son buenas. En la literatura sobre seguridad, a las personas que husmean en lugares donde no tienen nada que hacer se les llama atacantes. Sus motivaciones son distintas, y van desde: robos, hacktivismo, vandalismo, terrorismo, espinonaje, extorsión, fraude, etc.