La inteligencia epidemiológica se clasifica en función del enfoque (prospectiva y retrospectiva), la metodología (análisis descriptivo, analítico, modelado predictivo, Big Data y machine learning), la fuente de datos (primarios, secundarios, en tiempo real), el nivel de aplicación (local, regional, nacional, global), y la finalidad (detección de brotes, evaluación de intervenciones, gestión de riesgos, planificación y política). Esta clasificación permite una comprensión más estructurada y eficaz del uso de datos y análisis en la salud pública y ocupacional.