Según López-Pastor et al. (2016) "La aplicación de modelos y sobre todo, su hibridación, permite partir de las habilidades motoras para estimular la estructuración cognitiva de los alumnos, proporcionando estructuras explicativas que organizan y dan sentido al aprendizaje." (como se cita en Hernandez, Hortigüela, et al. 2021, p. 89)
La hibridación de modelos pedagógicos permite una mejor adaptación e individualización al contexto de práctica específico de cada grupo de estudiantes.
Su aplicación se produce en auténticos entornos de aprendizaje en los que los estudiantes participan, deciden, se involucran, comprenden las interrelaciones de las actividades físico-deportivas y son capaces de transferir conocimientos a otros contextos.
Investigar los modelos pedagógicos a través de su implementación en el aula puede ofrecer una perspectiva empírica y obtener resultados generalizables sobre el uso de uno o varios enfoques para la enseñanza de la educación física.