Algunas causas de la formación de biomas incluyen factores como el clima, la topografía, la latitud y la altitud. Las consecuencias de los biomas son principalmente ecológicas, ya que influyen en la diversidad de especies, la disponibilidad de recursos, el ciclo de nutrientes y el equilibrio de los ecosistemas. Cada bioma tiene características únicas que determinan qué tipos de plantas y animales pueden habitar en él, lo que a su vez afecta a toda la cadena alimentaria y a la biodiversidad en general. Los biomas son fundamentales para el mantenimiento de la vida en la Tierra y juegan un papel crucial en la regulación del clima global.