Conlleva registrar y reportar las transacciones financieras de una escuela, como ingresos, gastos, y bienes. Además de esto, se busca mantener un presupuesto, auditar y adherirse a las leyes y regulaciones federales, estatales y locales. Cada movimiento es analizado por administradores, consejos técnicos y otros accionistas para comprender cómo proseguir en el manejo de los recursos financieros.