Juegos de exploración sensorial: como jugar con arena, agua, pinturas, masas sensoriales, explorar diferentes texturas, olores y sabores.
Juegos de movimiento libre: como gatear, rodar, trepar, saltar, correr, balancearse y girar.
Juegos de equilibrio y coordinación: como caminar sobre líneas, saltar obstáculos.
Juegos de música y movimiento: Involucran actividades donde los niños pueden bailar, cantar, jugar con instrumentos musicales simples y seguir ritmos con su cuerpo.
Juegos de construcción: Estos juegos implican la construcción de estructuras usando bloques, piezas de madera, legos u otros materiales similares.
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