El género: se considera al género masculino como una variable con mayor vulnerabilidad al riesgo, debido a que en situación de quiebra familiar, los niños tienen más probabilidad que las niñas de ser reubicados en alguna institución, a diferencia de las niñas y de reaccionar a través de conductas oposicionistas, lo cual, a su vez, genera respuestas negativas de sus padres.