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Capítulo XVI: El autocuidado del terapeuta - Coggle Diagram
Capítulo XVI: El autocuidado del terapeuta
El síndrome de burnout: Síndrome psicológico que deviene de una respuesta prolongada a estresores interpersonales crónicos en el contexto del trabajo y se caracteriza por la manifestación de síntomas de agotamiento psíquico, emocional y físico. Se acompaña por sentimientos de cinismo y desapego al trabajo y una sensación de ineficacia y falta de logros.
Factores de riesgo en el desfase existente en tres variables fundamentales: el espíritu altruista implícito a este marco de actividades, la formación recibida y la realidad laboral a la que se aspira o pertenece.
Fases del síndrome de burnout: Proceso de iniciación lenta e imperceptible que va instalándose sobre la base de una acumulación progresiva de micro estresores e irrumpe de manera brusca, sin tener la posibilidad de conectarlo con un evento puntual estresante.
Fase de agotamiento y frustración: Aparece una sensación de agotamiento que se acompaña de síntomas físicos y psíquicos y con frecuencia se desarrollan conductas compulsivas y adictivas con el propósito de mitigar el malestar físico y emocional. Disminuye la autoestima y la autoeficacia, sensación de desmoralización, desilusión y falta de sentido o logros para la persona.
Fase de apatía: Aparecen actitudes y conductas de evitación, distanciamiento, indiferencia e insensibilidad hacia los pacientes. Las tareas estresantes se evitan o rechazan. Marcada disminución de la capacidad para sentir y cuidar de otros.
Fase de estancamiento: En un segundo momento, el profesional comienza a percibir que las metas a las que aspira se distancian y hay una asimetría entre las demandas a las que tiene que responder y los recursos que dispone para dar respuestas a ellas. Reducción de la motivación y de la creatividad.
Fase de colapso: Resultado final que se produce como un derrumbe de la capacidad laboral y del desempeño por una implosión emocional, psíquica y física. El profesional se aleja cada vez más de la posibilidad de utilizar sus recursos y tomar decisiones.
Fase de entusiasmo: Al inicio de una trayectoria laboral que culmina con la instalación del desgaste profesional; emprende su tarea con energía, compromiso y orientado a lograr sus metas.
Componentes del síndrome de burnout: agotamiento, despersonalización y baja realización personal.
Despersonalización: Representa el componente interpersonal del síndrome y se refiere a la presencia de sentimientos de indiferencia, actitudes y comportamientos cínicos, insensibles y distantes hacia quienes les brinda los servicios.
Reducida realización laboral: Aparición de sentimientos de inadecuación e ineptitud profesional, por tanto, se siente abrumado y superado en su capacidad de respuesta ante las demandas laborales cotidianas.
Agotamiento o fatiga emocional: componente del estrés individual del burnout y hace referencia a sentimientos de sobreexigencia y estar exhausto. Se experimenta cansancio y debilidad, sin poder reabastecer la falta de energía.
Síntomas y signos del síndrome de burnout: Presenta una constelación de síntomas y signos, los cuales pueden ser agrupados de la siguiente manera:
Relacionados con el trabajo: disminución del rendimiento, absentismo, tardanzas, mayor rotación en el puesto de trabajo.
Síntomas interpersonales: conflictos, insensibilidad, desconexión con los demás o aislamiento.
Conductuales: reactividad, agresividad, aislamiento, abuso de sustancias, conductas compulsivas.
Síntomas cognitivos: dificultad para tomar decisiones, deterioro de la memoria, como olvidos de turnos y temas a tratar, disminución de la concentración y disminución de la capacidad creativa.
Emocional: Irritabilidad, pérdida de interés, abulia, culpa, desesperanza, anhedonia, insatisfacción, aburrimiento, sensación de vacío, tristeza, depresión y deterioro del autoestima.
Cambios espirituales: pérdida de fe y del sentido laboral, crisis de creencias y valores, crisis vocacional (vivencias de incompetencia y fantasías de abandono o cambio de trabajo.
Físico: fatiga, anergia, cefalea, insomnio, somatizacion, tensión muscular, disminución de la libido, alteración del sueño y del apetito.
Factores personales asociados al síndrome de burnout
Estado civil: Profesionales con pareja tienen índices más bajos de burnout en diferentes profesiones. Apoyo socioemocional recibido por parte del cónyuge o de los familiares son algunas variables significativas de prevención.
Estilos de atribución: Creencias que una persona tiene para explicar los sucesos: Locus de control, estabilidad y controlabilidad.
Edad: Cuanto mayor la edad, menor la presencia de síntomas de burnout. De los 25 a los 40 hay mayo riesgo de presentarse.
Variables de la personalidad
Neuroticismo: Tendencia a experimentar síntomas de ansiedad y depresión frente a situaciones estresantes. Actitudes temerosas, agresivas u hostiles, estados emocionales negativos, impulsividad, autocrítica.
Adicción al trabajo: Dedican al trabajo más tiempo de lo que la situación exige y hacen del trabajo lo central de sus vidas, al punto que exhiben falta de interés por otras actividades todo lo cual trae sufrimiento por la incapacidad para interrumpir la compulsión a trabajar.
Tipo A: Manifiestan rasgos de impaciencia, ritmo acelerado, esfuerzo por el logro, competitividad, agresividad, hostilidad, y compromiso excesivo por el trabajo.
Género: Despersonalización más frecuente en hombres, mientras que el cansancio emocional es más elevado en mujeres.
Factores protectores: Variables de la personalidad protectoras frente a los agentes estresantes de la vida cotidiana y el estrés laboral.
Control
Reto o desafío
Compromiso
Resiliencia
Agencia personal
Autoeficacia
Optimismo
Autonomía
Autodeterminación
Fortalecimiento.
Control