Problemas con los fines: somos una naturaleza racional, y, por el otro lado, somos una naturaleza social. Naturaleza racional porque nuestros apetitos “naturales”, nuestros “deseos”, están atravesados por el deseo del saber. Saber, justamente, de esos fines. Y somos de naturaleza social, porque nuestras representaciones “racionales” de los bienes, están atravesadas por el lenguaje, y por la dinámica de las interacciones sociales.