El texto narra la situación del Rey Tirian después de ser golpeado y atado por los calormenes y el Mono. Tirian está amarrado a un árbol y observa cómo las Bestias Hablantes se dispersan después de una reunión frente al establo donde el Mono se encuentra. Mientras está atado, unas criaturas menudas, como Ratones, Conejos y Topos, llegan para darle comida y bebida. Estas criaturas le expresan su lealtad y preocupación por él, pero también le revelan su creencia de que el Mono y los calormenes están actuando bajo las órdenes de Aslan. A pesar de esto, las criaturas tienen miedo de desatar a Tirian por temor a la ira de Aslan. Tirian reflexiona sobre la historia de Narnia y su esperanza de recibir ayuda de los niños de otro mundo. En un momento desesperado, llama a los siete amigos de Narnia en un sueño vívido, pero su voz no produce sonido y se despierta aún atado al árbol, enfrentando la cruda realidad de su situación.