Existe una parábola, un relato de Alejandro Jodorowsky que se narra en sus cómics "Fábulas Pánicas".
Donde el personaje principal emprendía un periplo (viaje) en la búsqueda de un árbol que era famoso por ser inmortal. Después de un tiempo encontraba el lugar donde yacía el célebre (famoso) árbol eterno. Pero, se encontro con un agujero.
Confundido pregunto que había pasado y le respodieron que "como era un árbol inmortal no necesitaba sus hojas para obtener energía del sol, así que se deshizo de ellas. Como las ramas solo las necesitaba para sostener las hojas, también se deshizo de ellas. El tronco solo sostenía las ramas, por lo tanto no tenía motivos de conservarlo y desapació, las raíces solo le servían para alimentar al resto del árbol el cual ya no estaba, así que también se deshizo de ellas.
Esta fábula puede interpretarse como un invitación a trascender el mundo material, pero el autor desestima la importancia de los frutos, ya que son aquello que le da sentido al resto del árbol, sus semillas son aquello que permite que halla nuevas generaciones y es lo que el árbol ofrece como dulce alimento para el resto de los seres vivos.
Invita a reflexionar sobre "¿cuáles son mis valores y convicciones?, ¿La carrera que elija, la profesión que desempeñe están de acuerdo con mis principios?, ¿Puedo con mi trabajo contribuir a hacer un mundo mejor?".