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Esquema del principio de la conducta humana 3.-Estilo de vida
Para que el hombre logre superarse apoyándose en sus sentimientos de inferioridad, es preciso que guie su vida de cierto modo prescrito, llamo Adler a esto estilo de vida
El estilo de vida que cada ser humano busca, es una combinación de dos cosas
Su dirección interior de conducta, auto impulsada y auto dictada, y las fuerzas del ambiente que ayudan, interfieren o vuelven a conformar la dirección que el yo interior desee tomar
El yo interno es la parte más importante de este sistema bidireccional. Un acontecimiento único puede producir una reacción por completo diferente dentro de los yoes internos de dos individuos
El rasgo principal es que el yo causa principalmente la conducta en su interior mismo pero siempre en contraposición con el ambiente.
Para Adler el hombre no era una pequeña astilla que flotaba libremente en las aguas de la vida, levantándose y cayendo, avanzando y retrocediendo de acuerdo con el árbitro de otras fuerzas.
El hombre tiene y tendrá siempre la capacidad de interpretar para si las fuerzas exteriores, y posee también la capacidad de evitar atacar o ser derrotado por esas fuerzas externas.
La derrota por esas fuerzas externas
La derrota podría exigir nuevos caminos, mientras que el ataque directo contra las fuerzas externas tal vez reforzara o debilitara la estructura interna.
La evitación pudiera hacer que el esfuerzo tomara direcciones por completo nuevas. Sin embargo un rasgo sobresaliente de cualquier variable que el hombre pudiera sufrir de las fuerzas externas es su aptitud para manejar sus propios asuntos.
Según Adler el hombre tiene la suficiente voluntad aunque no siempre totalmente libre para disponer su vida como mejor le acomode.
Pese a que Adler fue uno de los primeros en reconocer los efectos de las fuerzas ambientales, valiosa aportación a la psicología social no pudo aceptar el enfoque exclusivamente ambientalista del hombre que ve en este a un mero producto del ambiente. Contrariamente, Adler afirma que hay un abundante material que nace y se desarrolla con el hombre: el sistema auto operante llamado estilo de vida.
El estilo de vida de cada ser humano es único.
Adler pensaba que probablemente no han existido dos seres humanos que hayan tenido estilo de vida idénticos
Dos fuerzas por lo menos exigen de cada individuo un estilo de vida único.
La primera fuerza proviene de la herencia y consta de todos los componentes variables inherentes al sistema en el momento del nacimiento. La segunda surge de la variante ambiental la cual empieza a influir en todo ser humano inmediatamente después de que este nace.
Como es imposible que dos seres humanos ocupen el mismo espacio al mismo tiempo el ambiente de cada uno es por consiguiente distinto.
los gemelos siameses no se contemplan desde el mismo punto de vista.
Es posible suponer que dos seres humanos se comportaran de diverso modo por haber heredado diferentes ambientes y diferentes sistemas para los freudianos el sexo es el sine que non de la conducta de todos los hombres .Para los alderianos el sexo puede o no ser decisivo para cualquier conducta humana, y en todo caso dependería del estilo de vida del individuo.
A pesar de que cada vida es única Adler creía en ciertos vínculos vigorosos y comunes a las personas. Así como todo ser humano necesita de las funciones orgánicas del corazón, los pulmones y el hígado necesita también de sentimientos de inferioridad y superioridad y de un estilo de vida característico.
Toda persona tiene las mismas metas que espera alcanzar mediante su yo creador pero el camino hacia esas metas es siempre diferente. Su conducta al moverse hacia aquellas es invariable disímil. Sin embargo los móviles de la acción son una y otra vez sentimientos de inferioridad y de superioridad.
Así como hay consistencia en los sentimientos de inferioridad y superioridad de todo mundo, la hay también en grado sumo dentro del estilo de vida del individuo. Con frecuencia el estilo de vida prescribe una cualidad interpretativa singular en todas las experiencias a que pueda enfrentarse el ser humano
. El individuo cuyo estilo de vida gire en torno a creerse abandonado y no amado interpretara todas sus experiencias dentro de ese marco de referencia.
Se ignora toda actividad no sujeta a tal interpretación o se la deforma para adecuarla a la interpretación deseada
El niño no amado siente que todos los contactos humanos comprueban esa situación de desamor; en cambio los contactos con quienes si lo aman, le darían una imagen de como seria la vida si el no fuese un no amado.
El individuo cuya vida se centre en sentimientos de agresión y poder calificar de reto al yo cualquier manifestación de un poder en contra, mientras que cualquier manifestación de cooperación o debilidad le indicara cuan fuerte es el.
Sin embargo la mayoría de los seres humanos carece de estilo de vida con tonos blancos y negros tan claramente contrastantes. Como se verá después el yo creador y en particular el interés social mejora el estilo de vida. Muchas personas siguen un estilo de vida atemporado por metas más amplias que las de los ejemplos citados.
No obstante el estilo de vida fundamental no es una cosa amorfa que se agrupe en conceptos vagos como desear ser, de modo nebuloso, una buena persona.
Es un agente vigorosamente interpretativo y que relación y controla todas las acciones de la vida de una manera fija
Sigue funcionando a través de la existencia y permanencia constante
Es la única fuerza unificadora de la vida.
Desde el nacimiento hasta los cinco y seis años se va fijando el estilo de vida, halla su fundamento en las capacidades heredadas por el niño
De igual importancia de acuerdo con el uso y la interpretación que el infante haga de esas capacidades así será el estilo de vida que durante esos años se le formara y que según Adler es muy raro que llegue a cambiar.
Lo que si cambia con frecuencia es la forma de expresión que el individuo emplea para llegar a los fines deseados.
Cambiar deliberadamente el estilo propio de vida que en esencia es el único modo de cambiarlo, resulta doloroso pues en el momento del cambio no se tiene estilo de vida situación intolerable.
Adler considera que la forma más proactiva de cambiar consiste en la desviación del estilo fundamental hacia fines que hallen cada vez menos frustración.
Entonces el estilo de vida permanece de suyo constante durante toda la vida. Varían los modos de lograr metas y el mecanismo de interpretación usado para satisfacer el estilo de vida. De esta manera para el niño no amado cuyo estilo de vida es no ser amado, le resulta más practico forjarse metas fantasiosas donde el amor no resulta tan importante que no pueda convencerse de que el pasado sin amor no es importante y de que las posibilidades de ser amado en el futuro recompensarían al pasado.
Adler creía en la posibilidad de cambiar el estilo de vida fundamental, pero consideraba que con frecuencia costaba demasiado en emociones y en energía. Además el éxito que hasta un estilo de vida defectuosa alcanza, hace aventurado el cambio.
Es mucho más fácil continuar con el viejo y conocido estilo que se va mecanizando y fijando a través de los años que cambiar Adler daba tanta importancia a los años formativos de la infancia que escribió mucho sobre métodos educativos. Fue uno de los primeros en establecer clínicas para enseñar a educar niños.
También dedico mucha energía a mejorar las escuelas y en particular a educar a los padres dándoles a conocer los riesgos que implicaba in entrenamiento infantil deficiente.
Como se desarrolla exactamente un estilo de vida, que fuerzas crean un modo de vida casi inmutable, porque existe tantos estilos de vida divergentes aun en los niños de la misma familia cuyo ambiente es el mismo, acaso la respuesta está en el sentimiento de inferioridad universal los matices individuales han de provenir de otras fuentes
Esas fuentes tomadas por Adler como explicación de la singularidad existente en la personalidades surgen de condiciones físicas psicológicas y sociológicas distintas en cada ser humano
Al manejar un conjunto distinto de estas tres influencias cada persona surge distinta a cualquier otra persona
Algunos factores específicos que producen un estilo de vida defectuoso, provocando diferencias en los hombres son las experiencias infantiles el número de hermanos y hermanas que se tengan y el orden de nacimiento en la familia a esto último se le llama posición ordinal.
Como resultado de un trabajo terapéutico con individuos Adler propuso tres factores que de no ser compensados o controlados crearan estilos de vida inoperantes dentro de la sociedad a la vez que ocasionara una vida de dolor e infelicidad al propio individuo y a los demás .
Esos factores son inferioridades de naturaleza orgánica o mental una infancia plena de mismos y caprichosa o el abandono durante la niñez.
Es lógico que el niño con desventajas físicas tenga mayores sentimientos de inferioridad que el niño físicamente capaz, y ya sea que no logre superioridad o bien que la logre con éxito notable, queda el hecho de que su incapacidad física es sumamente instrumental para formular su estilo de vida
Algunos niños codebilidades orgánicas nunca vencen sus sentimientos de inferioridad y sucumben a un estilo de vida derrotista y sujeto a todos los peligros de la existencia.
Otros niños y muchas biografías nos lo recuerdan, compensan una debilidad orgánica tan vigorosamente que logran un grado de superioridad más elevado de lo que haría esperar su talento mediano.
En todos los campos existen ejemplos como el citado. Personas de baja estatura que consideran su tamaño un defecto orgánico, aunque no lo haga así la sociedad han logrado éxito sorprendentes en los deportes en el arte o en la industria
Niños crónicamente enfermos que han luchado con valor por compensar sus males llegan a obtener más éxito de los que hubieran logrado de tener cuerpos físicamente normales.
Es obvio que compensar la debilidad orgánica no produce automáticamente el éxito. La senda inferioridad-superioridad solo los lleva al nivel de seres humanos con cuerpos normales.
Sin embargo el ingrediente de mejoramiento en si puede resultar poco común para Adler, el rasgo sobresaliente de esos casos es que el estilo de vida queda formulado por la debilidad orgánica del individuo.
En algunos casos un patrón de vida defectuoso proviene de una inferioridad orgánica demasiado extrema para poder vencerla. En otros casos la inferioridad orgánica agrega vigor y actividad de meta compensatoria lo que da lugar a superioridad dentro del yo.
Por varias razones el daño mental como fuente de sentimiento de inferioridad tiene en nuestra sociedad resultados en cierto modo más severos
a) Es más fácil lograr la compensación con un cerebro limitado que con uno normal ya que el primer casi extraña dificultad de comprensión.
b) La variedad de caminos para lograr la compensación es más limitada en las actividades mentales que en las físicas.
d) D) la sociedad comprende y tolera menos las actividades compensatorias de los mentalmente inferiores que de los físicamente inferiores; por consiguiente es de esperar hallar, más estilos de vida defectuosas entre los mentalmente deteriorados que los físicamente deteriorados.
c ) La sociedad actual funciona más con base en el poder cerebral que en el muscular
El grado en que alcancen superioridad ambos tipos, físicamente y mentalmente dañados, depende según Adler del grado de aliento y guía realista que el niño recibe de los padres o de otras figuras adultas paternas, Adler creía que los padres eran particularmente importantes en el plan de modelos por el propio estilo de vida de los padres, Haciendo hincapié en el modelo paternal como aspecto fundamental de las luchas del niño por ser superior.
Adler creía firme mente que el niño mimado y caprichoso es un lisiado psicológico cuya vida carece por completo de un yo verdaderamente superior. Adler desaprobaba con vehemencia a los padres o a las figuras autoritarias que consentían y mimaban al niño.
Ceder demasiado a menudo a los deseos de los niños lo priva de la invaluable oportunidad de ejercer y desarrollar un sentimiento de superioridad dentro del yo. Habiéndosele privado del único reto que le permitiría crecer el niño se ve preso en un estilo de vida que no le sirve para nada.
Y el niño carece de valor para sí mismo y vale todavía menos para el mundo. Consideraba a los mimados el azote de la sociedad., la exigencia egocéntrica de la persona mimada cuyo estilo de vida consiste en tomar de los demás lo que le hace falta para lograr una falsa superioridad antes que desarrollar dentro de si la gran lucha por emerger de la inferioridad a la superioridad
Estas personas cuyas demandas sobre otros no cesan en la edad adulta son a menudo potencialmente peligrosas pues téngase presente que la duración del estilo de vida es igual a la de la existencia misma y que cuanto mas resistente sea ese estilo mayor será su arraigo en el ser.
El niño abandonado sufre igualmente al desarrollo su estilo de vida, aunque su estilo de vida defectuoso sea tan dañino y doloroso para el como para la persona mimada el suyo, hay menos fricción entre él y la sociedad.
Es natural que tampoco aporte nada a su medio social, pero su verdadera pérdida consiste en no poder triunfar en la vida.
El abandono lo obliga a tenerse a si como único modelo
La auto guía por ensayo y error puede resultar tan costoso en esfuerzo que finalmente deja de luchar por ascender.
Incluso los éxitos que logran no parecen reforzados por otras personas.
El resultado final es un estilo de vida indiferente que a él no le produce felicidad ni placer y este vacío se proyecta hacia las otras personas.
Las condiciones sociológicas pueden ejercer igual fuerza para moldear un estilo de vida defectuosa a pesar de que las condiciones psicológicas y físicas sean normales. Adler afirmaba que nunca acaba la reciprocidad entre el yo y las fuerzas sociales.
En resumen el hombre crea su estilo de vida basado en las condiciones físicas, psicológicas y sociales en que se desarrolla. La psicología de la posición no es muy fructífera para los investigadores aunque se siga utilizando. Se considera la posición familiar de hijos únicos de niños de familiares numerosas y de niños con muchos hermanos del sexo opuesto, prescindiendo la psicología de posición.
Aunque Adler sin embargo se sentía descontento con los aspectos mecanistas del enfoque estilo de vida que estudia al hombre en su trayectoria de la inferioridad o la superioridad.
Sobre la base de algunas ideas anteriores acerca del hombre como estructura propia, dinámica, unificadora y con gran facultad interpretativa, Adler dio un paso más y formulo el concepto del yo creador.