La conexión de pensamientos se vuelve lenta y nebulosa, y mientras más presión ejercemos, menos vemos la luz. Hemos estado en estos casos y lo primero es entender que este reto creativo, este bloqueo de ideas, es temporal, y lo segundo, identificar qué tipo de bloqueo tenemos. En seguida se proporciona una descripción
breve de los tipos de bloqueo a la creatividad
Bloqueo emocional
El miedo es protagonista.
En este caso, imaginar el peor escenario posible permite ver que nada es en realidad tan fatal como lo imaginamos. ¡Inténtalo!
Bloqueo perceptivo
Nuestra forma de percibir el mundo en ocasiones nos limita. En este caso, comenzar a cuestionar el porqué de nuestros pensamientos permite romper un poco esos ideales.
Bloqueo mental
Los pensamientos ya construidos y nuestra forma de ver la realidad están rígidos y no dejan espacio para dar cabida a nuevas ideas. En estos casos, romper rutinas o invertir el orden reconfigura nuestros procesos.
Bloqueos ambientales
El espacio físico influye en el arte del pensamiento. Si lo que se quiere es crear algo diferente, cambiar de ambiente puede ser un gran estimulante.
Bloqueos expresivos
Consiste en intentar desapegarse de las formas clásicas de expresión.
Trata de imaginar cómo lo haría tu idea; cómo se comunicaría ella; cómo se aproximaría a la realidad, por medio de qué canales, qué estilo de lenguaje; ¿cómo lo haría?