La tercera revolución industrial, también conocida como la revolución digital, comenzó en la segunda mitad del siglo XX y continúa hasta el presente. Está impulsada por avances en la tecnología de la información y las comunicaciones, como la computación, internet y la inteligencia artificial. Estos avances han transformado la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos, y han dado lugar a la digitalización de la economía y la sociedad.