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Transferencia y contratransferencia - Coggle Diagram
Transferencia y contratransferencia
Transferencia
Freud acuña el término
Una peculiar relación entre el paciente y el terapeuta a través de un falso enlace en el cual el paciente adjudica al terapeuta sentimientos, generalmente desagradables, colocándolos en el presente.
Este nuevo síntoma debe ser tratado igual que otros síntomas.
Freud distinguía dos tipos de transferencias:
Las positivas son sentimientos tiernos hacia el terapeuta.
Las negativas son sentimientos hostiles.
Normalmente las ofensas, a menos que se haya cometido un acto que lo amerite, no son personales, van dirigidas a otra persona.
El fenómeno molesto que interferiría se podría convertir en una herramienta útil y puede jugar un importante papel en la cura.
El aspecto positivo era más frecuente que se presentara al
inicio
y las hostiles
en el curso
de la cura.
Hay una división entre la transferencia erótica y erotizada
La transferencia erótica
Manifestaciones amorosas positivas en las que el paciente reedita y edita estos sentimientos hacia el terapeuta y establece un vínculo analizable que resultará en beneficio del tratamiento. Es una transferencia positiva.
Te puedo servir más como hombre como tu terapeuta, que como tu pareja.
Las transferencias erotizadas
Manifestaciones adquieren tintes de exigencia con elementos marcadamente hostiles, destructores en que se le pide al terapeuta que satisfaga un deseo infantil. Es una transferencia negativa.
Los factores en común entre las diversas definiciones resaltan que en la transferencia se manifiestan
conductas infantiles
favorecidas por la situación analítica y actualizadas en el terapeuta.
Además de estos elementos del pasado existe una nueva experiencia con el terapeuta y que la comprensión de ambos factores,
la repetición de conductas infantiles y la experiencia inédita con el terapeuta
, así como su manejo interpretativo y vivencial son la clave de la labor terapéutica. Y podemos analizarlas como a cualquier síntoma neurótico.
La transferencia es el camino real al inconsciente.
Las manifestaciones transferenciales negativas son las causantes de una gran cantidad de problemas en los tratamientos psicoanalíticos.
Algunos autores piensan que su manejo inadecuado, generalmente por diversas maneras de evasión de parte del terapeuta, es lo que produce la mayor parte de los fracasos.
Freud sostenía que los pacientes con problemas serios de narcisismo son incapaces de establecer relaciones transferenciales. Esto también sucede con pacientes neuróticos.
Kohut enfatiza el rol de la empatía, pues es de gran importante y desarrolla una posición teórico-técnica al respecto.
La transferencia psicótica: los pacientes psicóticos pueden incluir al terapeuta en su sistema delirante y tratan al terapeuta como si realmente fuera su padre, madre, etc.
Contratransferencia
Freud acuñó el término
La respuesta emocional del terapeuta a los estímulos provenientes del paciente.
H. Racker fue el primero en considerar a la contratransferencia ya no solo como un obstáculo para el tratamiento sino como un instrumento útil para este mismo.
En la actualidad podemos considerar tres diferentes enfoques que conceptualizan este tema:
La totalista que considera que todos los sentimientos del terapeuta hacia el paceinte deben ser considerados como contratransferenciales
Se visualiza a la contratransferencia como una respuesta normal que responde a un papel específico de parte del terapeuta, que es un complemento o contra-parte de la transferencia del paciente.
La concepción clásica en la cual se le considera como una reacción inadecuada inconsciente.
El terapeuta ya no es un participante pasivo en la relación. Considera sus reaccione contratransferenciales como inevitables e intenta comprenderlas para que, ya "metabolizadas", las presente al paciente.
En este momento es importante introducir la relación entre el encuadre y la contratransferencia. El encuadre es el espacio en donde se producirán los fenómenos transferenciales y contratransferenciales
La dualidad transferencia-contratransferencia es un continuum de experiencias identificatorias entre ambos participantes y si deseamos intentar precisar y aclarar estos elementos podemos subdividirlos en:
El control que se tenga de ellos
La involucración-separación y establecimiento de límites entre los participantes
El tipo y grado de concientización que se tiene de toso los factores involucrados
El tipo de procesos identificatorios involucrados