La atención plena, también conocida como mindfulness, se refiere a la capacidad de estar plenamente presente y consciente en el momento actual, sin juzgar ni reaccionar de manera automática. Implica prestar atención de manera intencional a los pensamientos, emociones y sensaciones físicas sin distraerse por el pasado o el futuro.
La meditación, por otro lado, es una práctica que busca entrenar la mente para alcanzar un estado de calma, claridad y enfoque.
- Comprender los Fundamentos:
Lee sobre los conceptos básicos de la atención plena y la meditación para comprender sus fundamentos.
Familiarízate con la importancia de la respiración, la conciencia del momento presente y la aceptación sin juicio.
Elige un momento específico del día para practicar la atención plena o la meditación. Puede ser por la mañana al despertar, durante el almuerzo o antes de dormir.
- Comenzar con Sesiones Breves:
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- Enfoque en la Respiración:
La respiración suele ser el foco central. Concédele toda tu atención, observando cómo entra y sale el aire.
Cuando la mente divague, trae suavemente la atención de nuevo a la respiración.
- Práctica de Atención Plena en la Vida Diaria:
Trata de llevar la atención plena a tus actividades diarias. Concéntrate completamente en lo que estás haciendo en ese momento.
Al caminar, come, o realiza tareas cotidianas, presta atención a tus sentidos y al movimiento de tu cuerpo.
