La pubertad marca el inicio de cambios biológicos que desencadenan la adolescencia, un periodo que abarca intensas transformaciones físicas, psicológicas y sociales. Aunque es considerada la época más saludable desde el punto de vista físico, los adolescentes enfrentan diversos riesgos y problemas de salud. La autonomía positiva y las oportunidades para el desarrollo son aspectos destacados, pero también se deben tener en cuenta los riesgos prevenibles, como accidentes, violencia y comportamientos de riesgo. La definición de adolescencia varía según las organizaciones, pero su impacto en la salud y el estilo de vida futuro es innegable. La maduración completa de la corteza prefrontal, esencial para discernir conductas, se alcanza hacia los 25-30 años, explicando la propensión de los jóvenes a conductas impulsivas y de riesgo hasta ese momento.