Luego de haber realizado la perforación, el pozo está en condiciones
de producir. En este momento puede ocurrir que el pozo sea puesto en
funcionamiento por surgencia natural, lo que no ocurre en la mayoría de las
perforaciones. Dependiendo de varias circunstancias, tales como la
profundidad del yacimiento, su presión, la permeabilidad de la roca
reservorio, etc., el fluido llegará a la superficie con caudales satisfactorios o
no satisfactorios.