Las empresas necesitan una organización y para iniciar, comienzan como un simple proyecto, con una idea de querer cambiar, mejorar o solucionar algo, algún problema que existe en la sociedad. Crear un producto o servicio desde cero implica conocer que es lo que necesitas, los recursos, tener ideas claras, coherentes que puedan ser cumplidas y lanzarse a querer lograr tus objetivos.