En el caso expuesto, el paciente tiene una orientación receptiva lo cual significa que su accionar es pasivo: esperar que las figuras de autoridad le satisfagan sus necesidades y suministros de vida, es cordial, sumiso y obediente, tiene relaciones sexuales e interpersonales poco estables. De igual manera, tiene una orientación explotadora, es abusivo o violento con las demás personas, ha tenido actos criminales, es desconfiado, se pone a la defensiva cuando se siente acorralado o agredido, siendo reactivo o precipitado en ocasiones.