Es un prejuicio que se manifiesta a través del recelo, odio, fobia y rechazo contra los grupos étnicos diferentes, cuya fisonomía social y cultural se desconoce. Se basa en los prejuicios históricos, lingüísticos, religiosos y culturales, e incluso nacionales, para justificar la separación total y obligatoria de diferentes grupos étnicos, con el fin de no perder la identidad propia.