Fue creado por Walter Thompson, un músico y compositor estadounidense, en la década de 1970. El Soundpainting permite a un director o conductor comunicarse con un grupo de intérpretes a través de gestos y señas específicas, indicando elementos como ritmo, dinámica, estilo y movimiento. Es una herramienta versátil que fomenta la improvisación y la colaboración entre artistas de diferentes disciplinas. Walter Thompson ha desarrollado este sistema a lo largo de los años, convirtiéndolo en una práctica ampliamente reconocida en el mundo de las artes escénicas y la improvisación.