Fuentes Naturales y antropogénicas Aunque existen fuentes naturales de mercurio (como la actividad volcánica, la erosión natural de los minerales que lo contienen, o los incendios forestales, que reemiten el mercurio depositado en la vegetación), las emisiones y liberaciones debidas a actividades humanas (extracción primaria de mercurio, minería y metalurgia de otros metales, depuración de gas natural, uso de mercurio en diferentes procesos y productos químicos, actividad de las incineradoras, crematorios, combustión de combustibles fósiles en centrales térmicas, cementeras...) han aumentado notablemente la exposición al mercurio, lo cual puede tener importantes efectos adversos para la salud humana y el medio ambiente. Liberaciones antropogénicas resultantes de la presencia de mercurio en materias primas como los combustibles fósiles (carbón, gas, petróleo y otros minerales extraídos, tratados y reciclados). El 85% de las emisiones antropogénicas de Hg provienen de esta fuente.