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LA LEY DEL ESPEJO - Coggle Diagram

- - - - Ejemplo:
        
        Me molesta esa persona que siempre hace mucha ostentación del dinero. Es posible que tenga que hacer una reflexión a la inversa: a lo mejor tengo que trabajar la relación con el dinero. Tal vez no hay un equilibrio. A lo mejor es una relación que tiene cierto componente de prejuicio con el dinero. Y puedo no darle suficiente valor económico a lo que hago. Esa persona está ahí para recordarte que el dinero también es importante.
        
        O por el contrario, nos molesta alguien porque nos parece que es demasiado amarrado. Esa persona nos viene a mostrar que, a lo mejor, somos muy sueltos con el dinero.
    - - Un compañero que, en el trabajo, reacciona mal en situaciones de estrés. A mí me molesta eso porque eso yo no lo hago, pero resulta que en ciertas situaciones de estrés, pero que no son las del colegio, me hacen perder el control. Y este compañero en la oficina, que constantemente pierde el control, me está recordando que eso no me gusta porque yo en algún momento también lo hago y también lo he hecho. Y está ahí para que yo vea lo feo que es y cómo tengo que transformar eso para que no me ocurra.
  - - - Cuando decimos estar hartos de que alguien nunca nos escuche, que se pone por encima de todos y que solo cuenta su opinión, pero al reflexionar y ser honestos con nosotros mismos, nos damos cuenta que nosotros hacemos lo mismo.
  - - - La pareja: conocemos a una persona. Esa persona nos fascina y ponemos expectativas en ella, pero en realidad estamos poniendo necesidades. Pasa el tiempo y esa persona se muestra tal y como es. Esa persona me está reflejando decepción, desencanto y frustración porque yo no tenía una imagen real de esa persona, sino que era mi expectativa egoísta puesta en esa persona.
- - - - Eso tan simple, en esta situación de riesgo, no lo hacemos en nuestra vida diaria.
        
        Es decir, cuando tengo incomodidad, cuando tengo ira, cuando tengo enfado, incluso cuando tengo dolor, no me ocupo de mi incendio, me ocupo de los posibles culpables que hay ahí afuera.
        
        Tendemos a poner el foco afuera y muy pocas veces lo ponemos dentro de nosotros mismos.
        
        Muchas veces ese dolor, esa ira, esas emociones nos conectan con circunstancias que hemos vivido antes.
        
        ¿Cuántas veces se ha repetido en mí ese dolor, ese enfado?
        
        ¿Cómo lo reconozco ahora y cómo antes?
        
        ¿Por qué se reproduce una y otra vez?
        
        ¿Qué es lo que tengo que aprender de esto?
  - - - Cuando te enfades deja de buscar a los culpables afuera. Mira tu ira. Cuida tu ira. Cuando sufras deja de buscar a los culpables afuera. Mira tu sufrimiento. Cuida tu sufrimiento.
- - - - Si me llaman desordenada y a mí me molesta, a lo mejor es que sí soy un poco desordenada y me lo tengo que trabajar.
- - - - Un paciente que nunca llega a su hora o está cambiando las citas constantemente, tal vez te está reflejando que debes trabajar la paciencia.
- - - - Personas iracundas que sueltan mucha hiel, que a la primera, están soltando zarpazos.
        
        Estas personas, en realidad, tiene una enorme necesidad de amor y, sobre todo, la mayor necesidad que tienen es de quererse a sí mismos.
  - - - Muchas veces hay hijos que nos sacan de casillas, que nos ponen contra las cuerdas, que ponen a prueba nuestros límites. Esos hijos están ahí para mostrarnos algo que no queremos ver y que tenemos que trabajar. en el momento en que trabajemos eso, a lo mejor, la actitud de ese hijo cambia o cambia eso que criticamos tanto.
        
        Esto es así de potente. Hay que trabajarse uno y después surge la magia.