El período Neolítico fue principalmente caracterizado por la transición que hicieron algunas poblaciones humanas de una economía de subsistencia a una economía productiva. Este proceso implicó el surgimiento de la agricultura, domesticación de ganado, desarrollo del sedentarismo, crecimiento de la población, descubrimiento de la metalurgia, división y diferenciación del trabajo, producción de excedentes y jerarquización social