Varios países han experimentado tendencias duraderas hacia un mayor multipartidismo, en especial Bélgica, pero también Austria, Colombia, Dinamarca, India, Italia, Noruega, y Suiza. En Alemania, Israel y Japón, el número efectivo de partidos descendió primero aumentando de nuevo a lo largo de la dos o tres décadas. Portugal constituye el único ejemplo de una clara tendencia hacia un menor número de partidos. En la mayor parte de los países restantes, hoy o bien existe poca variación a lo largo del tiempo, o bien fluctuación sin tendencia duradera alguna.