Indicadores Duros (con incidencia clara sobre los resultados) y Blandos
(Medición indirecta o no fáciles de cuantificar) Ejemplos: Indicadores duros: námero de unidades producidas, contratos rechazados, horas extras, costes unitarios, gastos de ventas, número de trabajos repetidos, número de accidentes Indicadores blandos: impuntualidades, visitas al médico, quejas de empleados, reacciones favorables, rapidez de decisiones tomadas, peticiones de traslados, implantación de nuevas ideas