las familias o las empresas esperan que la inflación en el futuro aumente en cierto porcentaje, digamos en 3%, seguramente incorporarán esas expectativas en sus negociaciones salariales, acuerdos con proveedores, ajustes contractuales de precios, entre otros, lo que al final se traducirá efectivamente en un incremento cercano a ese 3%. Esto se conoce en psicología como profecía autocumplida, lo cual significa que las creencias sobre ciertas situaciones pueden generar tal efecto en la mente de las personas que, como consecuencia, efectivamente se terminen cumpliendo.