Puede decirse que esta corriente se encuentra en fase actual de crecimiento y que, hoy por hoy, asume como tarea primordial, por un lado, situar en el centro del análisis la sostenibilidad de la vida y explorar las consecuencias de esto en el cuestionamiento de todas las concepciones conceptuales y metodológicas previas y, por otro, atender no sólo a las diferencias entre mujeres y hombres, sino a las relaciones de poder entre las propias mujeres.
Es una estrategia que impide valorar la diversidad de actividades realizadas por las distintas mujeres, al dar un concepto de trabajo doméstico muy centrado en la experiencia femenina occidental.
-