Los patagónicos, como los llamó Magallanes o los tehuelches, como los llamaron los misioneros jesuitas, poblaron la baja Patagonia hasta Tierra del Fuego. Los cazadores semisedentarios trabajaban la piedra como en el Neolítico europeo, producían cerámica, conocían el metal pero no sabían trabajarlo.
Divididos en dos grandes grupos, los que ocupaban la zona norte y los que ocupaban la zona más al sur, vivían principalmente de la caza y se desplazaban siguiendo las migraciones estacionales de los animales.