Ésta es una buena ocasión para sacar unos cuantos ejemplos de como la química sea más cercana a la vida cotidiana de lo que parece:
¿Has notado que es mucho más sencillo freír una patata si está cortada en trocitos pequeños en vez que pedazos más grandes? La velocidad de reacción (la fritura, en este caso) aumenta al aumentar del área superficial expuesta: una patata entera tiene menos área que la misma cuando esté troceada. Cuanto más grande la superficie de contacto entre dos reactivos, más alta la probabilidad de que éstos entren en contacto y, por lo tanto, más rápida la reacción. Lo mismo lo puedes comprobar comparando un jamón entero dejado al aire (se oxida) con otro jamón del mismo volumen pero cortado en lonchas y, en general, con cualquier ejemplo de comida que esté expuesta al acción del oxígeno atmosférico;