Bases anatómicas y fisiológicas
del electromiograma de superficie
El electromiograma de superficie (EMG) es una técnica utilizada para medir la actividad eléctrica de los músculos. La actividad eléctrica producida por el músculo se registra a través de los electrodos y se muestra como una señal en un monitor.
El EMG de superficie se basa en el hecho de que cuando un músculo se contrae, se produce una corriente eléctrica en las células musculares. Esta corriente puede ser detectada y registrada por los electrodos de superficie. Además, la actividad eléctrica del músculo se correlaciona con la fuerza de la contracción muscular, lo que hace que el EMG sea una técnica útil para medir la actividad muscular durante diferentes actividades físicas.
Los músculos están formados por fibras musculares individuales que se activan mediante señales eléctricas que provienen del SN. Estas señales eléctricas se propagan a lo largo de las fibras musculares y producen una contracción muscular.
Se utiliza en la investigación básica en fisiología muscular, la rehabilitación física y el rendimiento deportivo, para medir la actividad muscular durante movimientos complejos, como la carrera o el salto, y para evaluar la fatiga muscular.