Libros profeticos
1.- Libros proféticos.
1.- Se subdividen en “profetas anteriores”: Josue, Jueces; 1-2 Samuel y 1-2 Reyes.
2.- Y los “profetas posteriores”:
a. Profetas mayores: Isaías, Jeremías, Ezequiel (y Daniel en biblia cristiana).
b. Profetas menores: Oseas, Joel, Amós, Abdías, Jonás, Miqueas, Nahum; Habacuc, Sofonías, Ageo, Zacarias y Malaquías.
- El autor trata en este capítulo sólo de los profetas posteriores, mayores y menores.
- ¿Cuáles es la función del profeta? ¿Cómo se definen?, ¿Como se relacionan con las monarquías?
- Diferencias entre canones:
a. En LXX no se incluyen a los “profetas anteriores” entre los libros proféticos.
b. En LXX incluyen entre los profetas a Daniel.
c. Lamentaciones es colocado después de Jeremías.
d. En la biblia hebrea forma parte de los cinco rollos junto con Rut, Cantar, Qohelet y Ester.
e. Baruc, Carta de Jeremías, Susana, Bel y el dragón, existen solo en LXX, solo se escribieron en griego (deuterocanónicos).
2.- Dos consejos paralelos y rivales.
- Dos versiones del profetismo se pueden ver en 1 Re-22.
- Dos asambleas: Una en Samaria y otro en el cielo.
- En una, 400 profetas con Sedecías hijo de Quenaná. Asiste también Miqueas, hijo de Jimlá.
- Se le anima al rey Ajab a la guerra y predice la victoria.
- En el consejo divino se busca convencer al rey de que vaya a la batalla a entregar su vida.
- Finalmente, el espíritu divino propone: hacer que el consejo del rey se equivoque y predice lo falso al rey.
3.- Profecía verdadera y profecia falsa
- El planteamiento es que es un problema saber cuál es la profecía verdadera y cuál es la falsa.
- El relato muestra que el rey no sabe diferenciar. No le cree a Miqueas hijo de Jimlá.
- El profeta es alguien que anuncia el futuro, especie de adivino, sin embargo, en la Biblia es una persona inmersa en el presente y comprometida con el pueblo.
- El relato ilustra criterios de distinción.
- Criterios negativos: la unanimidad o mayoría es falso. Dicen lo que el rey quiere oír. Carecen de perspectiva de largo plazo, se ocupan de sus intereses y la suerte del pueblo es un valor secundario.
- Criterios positivos: Están dispuestos a pagar las consecuencias de su profecía, Hablan valientemente, a pesar de estar en desacuerdo con la mayoría, se arriesgan. El ejemplo es Miqueas, hijo Jimlá.
- En la historia de Israel, hay muchos como Sedecías, hijo de Quenaná y pocos como Miqueas, hijo de Jimlá.
4.- Los verdaderos profetas, miembros del consejo divino.
- Los profetas intervienen en los problemas de su tiempo.
2.- Son consultados para decisiones inmediatas.
- Solo en excepciones se le solicitan reflexiones generales sobre el destino de la humanidad y del universo.
- Llegan a defender valores e intereses con perspectiva de largo alcance.
- Amós afirma que no puede quedarse callado cuando están en juego los intereses del pueblo (Am 3,3-8).
- Un profeta busca en el consejo de Dios y no puede rehuir a su tarea de avisar al pueblo.
- Amós defiende la causa de los débiles, oprimidos y de los pobres.
- Isaías va en el mismo sentido (Is 8, 11-17),
- Isaías no se conforma, es crítico, no se acobarda y desconfía de los chismes de la gente.
- Isaías es congruente, veraz, no duda de la bondad, siempre confía en Dios.
- Miqueas nos pone otro ejemplo (Miq 2, 11).
- El verdadero profeta dice la verdad, aunque incomode, no se deja engañar con la popularidad, es lucido, y sagaz.
- Jeremías habla fuerte en contra sus adversarios, profetas o sacerdotes que no quieren ver lo grave de la situación (últimos momentos de Jerusalén 596-586 A.C.), (Jer 23, 17-24).
- Los falso profetas, dice Jeremías, quieren dar seguridad a la gente minimizando los peligros que amenazan a la ciudad de Jerusalén.
- El autor señala que otros profetas siguen la misma línea. Elías, Zacarias o Ezequiel.
- El profeta verdadero es un centinela, mientras el pueblo duerme avisa de los peligros que asechan, advierte que el pueblo despierte ante las amenazas, que otros no ven.
- “Centinela, ¿cuánto queda?, ¿cuánto queda de la noche?“, (Is 21, 11).