Está formado por células largas, con forma de filamentos, a las que se les denomina fibras musculares. Casi todos los músculos están unidos a huesos, pero hay excepciones en la lengua, porción superior del esófago, algunos músculos faciales y algunos esfínteres. Las fibras musculares estriadas son incapaces de dividirse, pero sí pueden surgir otras nuevas mediante la división de las células miosatélite.