Tal vez la primera reacción contra la propuesta de construir las ciencias sociales como ciencias explicativas, tomando como modelo para su estructuración y metodología a las ciencias naturales, fue la del filósofo hegeliano Wilhem Dilthey (1833 - 1911 ).
Para él, las que denomina ciencias del espíritu, como la historia y otras disciplinas que se ocupan de la cultura, deben tener un fundamento epistemológico diferente al que se le da a las ciencias naturales, pues mientras las primeras tratan con significados culturales, las segundas se refieren y estudian hechos externos.