Coggle requires JavaScript to display documents.
Resistencia y agencia
Pedagogía crítica como praxis transformadora
Crítica al neoliberalismo
Interseccionalidad y justicia social
Relación entre educación y poder
Currículo como construcción social
Influencia del marxismo
Conciencia crítica y praxis
Crítica a las narrativas dominantes
Educación multicultural y antirracista
Transformación del docente y del estudiante
Educación como lucha contra el capitalismo
Educación como práctica política
El docente como intelectual transformador
Crítica al neoliberalismo y a la mercantilización de la educación
La pedagogía crítica como resistencia y esperanza
Educación para la democracia y la ciudadanía crítica
Intersección entre cultura y poder
Importancia de las emociones y la ética
La educación como práctica cultural y política
Praxis transformadora: una acción reflexiva y transformadora. No se trata solo de transmitir conocimientos, sino de generar procesos colectivos de reflexión y acción para superar las condiciones de opresión.
Centralidad del "otro" : escuchar, reconocer y valorar la voz de los oprimidos, promoviendo su protagonismo en la construcción de una nueva sociedad.
Crítica al sistema hegemónico: cuestionar las estructuras capitalistas, coloniales y patriarcales que perpetúan las desigualdades en América Latina. El objetivo es construir un proyecto alternativo basado en la justicia y la equidad.
Educación como acto de liberación: partiendo de las experiencias y necesidades de los oprimidos.
Compromiso ético y político: la educación popular no puede ser neutral. Debe tener un compromiso explícito con los sectores excluidos y buscar superar las injusticias estructurales mediante procesos educativos que fortalezcan la solidaridad y la justicia.
Teología del pueblo y educación: vincula la educación popular con la espiritualidad y la fe del pueblo latinoamericano.
Educación como encuentro y diálogo: subraya la importancia del diálogo entre los educadores y las comunidades. Este encuentro fomenta el reconocimiento mutuo y permite una educación que se construye desde abajo, adaptándose a las necesidades específicas de cada contexto.
1. Educación desde la "sabiduría popular" : la importancia de partir de la cultura, los valores y las experiencias de las comunidades populares.
Ética de la liberación
Reconocimiento de los oprimidos como sujetos históricos
Crítica a las estructuras opresivas
Dimensión espiritual y social: La educación popular no es solo un proceso técnico o intelectual, sino también ético y espiritual. Busca liberar tanto en el plano material como en el personal, fomentando una visión integral del ser humano.
Educación como praxis liberadora: entiende la educación como un proceso de reflexión y acción que permite a los oprimidos comprender las causas de su situación y actuar para cambiarla.
Transformación estructural: la educación popular es un medio para cuestionar y transformar las estructuras de opresión que perpetúan la pobreza y la exclusión en América Latina.
Opción preferencial por los pobres: considera que la educación popular debe tener un compromiso explícito con los pobres. Este enfoque no solo busca asistirlos, sino reconocerlos como sujetos históricos capaces de transformar sus condiciones.
Compromiso con los excluidos: insiste en que la educación popular debe empoderar a los excluidos, permitiéndoles desarrollar una voz propia y participar activamente en la construcción de una sociedad más justa.
Espiritualidad liberadora: la educación popular debe nutrirse de una espiritualidad que conecte a los individuos con la solidaridad, la justicia y el cuidado de la creación. Este enfoque espiritual fomenta un sentido de responsabilidad colectiva.
Educación para la construcción de comunidades solidarias: fomentar valores como la cooperación, la equidad y el respeto mutuo, fortaleciendo el tejido comunitario en las sociedades más vulnerables.
Ecología integral y educación: Amplia la perspectiva; la educación debe fomentar una conciencia ecológica que reconozca la interdependencia entre las personas y el planeta, promoviendo un desarrollo sostenible y equitativo.
Teología encarnada en lo popular: la importancia de construir una pedagogía que valore los saberes y la espiritualidad de las comunidades populares, integrándolos en el proceso educativo.
Educación como mediación histórica: la educación popular no solo se centra en el cambio personal, sino que también actúa como una herramienta para transformar las condiciones históricas que generan opresión.
Educación desde la opción por los pobres: subraya que la educación popular debe partir de las necesidades y realidades de los pobres, colocándolos como protagonistas de su propia liberación.
Pedagogía desde la fe y el compromiso social: la dimensión teológica de la educación popular, vinculando la fe con la acción concreta por la justicia. La educación debe ser un espacio donde se unan la reflexión teológica y la práctica liberadora.
Centralidad de los pobres y oprimidos
Dimensión espiritual y ética
Transformación social y estructural
Diálogo y horizontalidad: plantea que la educación popular debe ser un proceso dialógico, donde educadores y educandos aprendan mutuamente. Este diálogo fomenta la horizontalidad, el respeto mutuo y la co-construcción del conocimiento.
Conciencia crítica y praxis transformadora: la formación de una conciencia crítica que permita a las personas comprender las estructuras de opresión que los afectan y actuar para transformarlas. La educación es, para él, una praxis que combina reflexión y acción.
Educación como práctica de la libertad: concibe la educación como un acto político que debe liberar a las personas de las condiciones de opresión. Su enfoque desafía la educación bancaria, que ve a los estudiantes como receptores pasivos, y promueve un modelo dialógico en el que el aprendizaje se construye colectivamente.
Educación como acto político: enfatiza que la educación nunca es neutral; está siempre vinculada a un proyecto político. En el caso de la educación popular, este proyecto debe estar orientado hacia la justicia social y la transformación de las estructuras opresivas.
Contexto y relevancia cultural: La educación popular debe partir de la realidad concreta de los educandos, conectando el aprendizaje con sus contextos culturales, sociales y económicos. Esto permite que el conocimiento sea significativo y empoderador.
Educación como herramienta para el cambio social: la educación es un medio para empoderar a las comunidades, ayudándolas a identificar las causas de su opresión y a organizarse para generar cambios estructurales.
Conocimiento desde las comunidades: destaca que el conocimiento válido no es exclusivo de las academias, sino que también se encuentra en las experiencias, saberes y prácticas de las comunidades populares. La educación popular debe recuperar y valorar estos conocimientos.
Construcción colectiva del conocimiento: La educación popular debe ser un proceso colectivo en el que los participantes, a través de la reflexión y la acción, se conviertan en protagonistas de su propio aprendizaje y transformación.
Investigación-Acción Participativa (IAP): desarrolla la IAP, un enfoque que combina la investigación social con la acción comunitaria. Este modelo busca que las comunidades participen activamente en la generación de conocimiento, superando la dicotomía entre investigador y sujeto investigado.
Enfoque emancipador: subraya que la educación popular debe buscar la emancipación de los sectores excluidos, fomentando procesos de autoorganización y fortalecimiento comunitario frente a las dinámicas de dominación
Centralidad de los oprimidos
Reflexión y acción
Conocimiento situado y colectivo