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Cuasas a largo plazo Guerra Civil Española - Coggle Diagram
Cuasas a largo plazo Guerra Civil Española
Politicas
Fragmentacion y Debilidad estatal
El uso recurrente de la violencia, como golpes de Estado o guerras civiles, se convirtió en un mecanismo habitual para resolver conflictos políticos, como evidencian las guerras carlistas (1833-1876).
España sufrió una constante inestabilidad política desde el siglo XIX, con múltiples cambios de régimen (monarquías absolutas, liberales, repúblicas y dictaduras). Ejemplo: la alternancia entre monarquía y república y el golpe de Primo de Rivera (1923) muestra la incapacidad para consolidar instituciones estables.
Centralismo vs. nacionalismos periféricos
La respuesta centralista, incluida la represión de movimientos como la Mancomunidad Catalana, incrementó la percepción de exclusión.
Desde el siglo XIX, el Estado central intentó imponer una identidad nacional uniforme. La abolición de fueros y la creación de provincias generaron tensiones con Cataluña y el País Vasco, donde surgieron movimientos nacionalistas. Ejemplo: las Bases de Manresa (1892) reivindicaban autonomía cultural y administrativa para Cataluña
Militares
Tensiones internas y africanismo
La división entre los militares africanistas (que combatieron en Marruecos) y los sectores más moderados del Ejército contribuyó al golpe de 1936.
Protagonismo político del Ejército
El Ejército intervino reiteradamente en la política española, desde los pronunciamientos liberales del siglo XIX hasta la dictadura de Primo de Rivera.
La pérdida de las colonias en 1898 (Cuba y Filipinas) y desastres como el de Annual (1921) deterioraron su prestigio y lo radicalizaron hacia posiciones reaccionarias.
Socioeconomicas
Desigualdades sociales
El control de la tierra por una élite terrateniente, especialmente en el sur (Andalucía y Extremadura), contrastaba con la pobreza extrema de campesinos y jornaleros.
Las desamortizaciones del siglo XIX no beneficiaron al campesinado y consolidaron el poder de los grandes propietarios.
Industrialización desigual y expansión del proletariado urbano
La industrialización concentrada en regiones como Cataluña y el País Vasco generó una nueva clase obrera sometida a condiciones de explotación laboral (largas jornadas, bajos salarios).
Las huelgas y conflictos laborales, como la Huelga General Revolucionaria de 1917, evidenciaron la incapacidad del Estado para integrar a las clases trabajadoras.
Polarización social e ideológica
Ejemplo: la Revolución de Asturias (1934) fue una respuesta a la entrada de la derecha (CEDA) en el gobierno.
La élite tradicional, compuesta por terratenientes, la alta burguesía y el clero, se unió para proteger sus privilegios, mientras que las clases populares, inspiradas en el socialismo, el comunismo y el anarquismo, buscaban reformas profundas.
Religiosas y culturales
Liberalismo y absulitismo
El liberalismo surgió en el siglo XIX como un intento de modernizar España, inspirándose en la Revolución Francesa y en los valores de igualdad y ciudadanía. Esto chocó con el absolutismo monárquico, que defendía los privilegios tradicionales de la aristocracia, la Iglesia y la monarquía.
Nacionalismo
Desde el siglo XIX, el Estado español buscó centralizar el poder y homogenizar la identidad nacional, suprimiendo los fueros y privilegios regionales. Esto provocó resistencias en territorios como Cataluña y el País Vasco, donde surgieron movimientos nacionalistas con características propias:
Influencia de la Iglesia
La Iglesia tuvo una posición privilegiada en la sociedad española desde el Antiguo Régimen. Era la encargada de la educación, la censura y los rituales culturales, y estaba profundamente vinculada al poder político
La influencia de la Iglesia generó resentimiento entre las clases populares urbanas y los sectores liberales. Los republicanos, socialistas y anarquistas veían en la Iglesia un símbolo de opresión y atraso.
Este conflicto cultural llevó al auge del anticlericalismo, visible en episodios como la quema de conventos en 1834, la Semana Trágica (1909) y las reformas laicistas de la Segunda República
Fascisimo y Nazismo
El fascismo italiano y el nazismo alemán sirvieron de modelo para sectores conservadores y autoritarios en España. Durante la dictadura de Primo de Rivera (1923-1930), se intentaron implementar medidas inspiradas en el autoritarismo de Mussolini